Carmen Mola: "Al escribir juntos ha surgido un estilo propio de Carmen Mola"

'La Bestia' es el título del thriller histórico ganador del Premio Planeta de este año. Detrás de 'La Bestia' está Carmen Mola, su autora, y, a su vez, detrás de Carmen Mola está la escritura a seis manos de Jorge Díaz, Antonio Santos Mercero y Agustín Martínez. Tres guionistas -antes que escritores- que bajo el seudónimo de Carmen Mola ya habían escrito tres novelas: 'La novia gitana' (2018), 'La red púrpura' (2019) y 'La nena' (2020).

Los autores explican que los tres tienen el mismo peso a la hora de documentarse, escribir y corregir la novela. Cuando inician el proceso de escritura no siguen "un sistema cuadriculado", sino que primero hacen un argumento muy cerrado y hablan mucho sobre ello. "Respondemos de una historia bien trabajada, con originalidad, potencia y los ingredientes que nos gustan", cuentan.

El estilo propio de Carmen Mola

Al escribir juntos, entre ellos ha surgido un estilo distinto que no tiene que ver con la forma de escribir de cada uno, sino que es el estilo propio de Carmen Mola. "Al escribir Carmen Mola, te pones un disfraz y surge un estilo que, al leer la novela no sabes quién ha escrito qué".

El hecho de que los tres sean guionistas -han trabajado en series como 'Hospital Central', 'Farmacia de guardia' o 'Sin tetas no hay paraíso'- también ha ayudado a formar el personaje de Carmen Mola. "Cuando empezamos a crear un personaje no sólo reamos su historia, sino su forma de hablar también", cuenta Jorge Díaz.

Paloma Sánchez-Garnica, finalista del Premio Planeta

La novela 'Últimos días en Berlín', de Paloma Sánchez-Garnica, firmada con el seudónimo Yuri Zhivago, ha sido elegida finalista de la 70 edición de los Premios Planeta. Su novela, ambientada en los años 30, tiene como telón de fondo el ascenso del nazismo y las purgas stalinistas en la Unión Soviética.

La novela 'Últimos días en Berlín', ambientada en los años 30, trata de entender cómo fue posible que todo fallase

A través de su protagonista, Yuri Santacruz, el lector puede caminar por esa sociedad "y tratar de entender por qué pasó aquello, cómo se fraguó el horror de la segunda guerra mundial y cómo fue posible que todo fallase", explica Paloma.

La autora ha querido plasmar la pasividad de una parte de la sociedad alemana que hizo posible que sucediese el genocidio a los judíos. En enero de 1933 había unos 500.000 judíos alemanes, de los cuales alrededor de 100.000 huyeron a lo largo de los cinco años siguientes.

¿Cómo es posible que los judíos se quedasen en esa Alemania tan agresiva? Ella misma se responde a esta cuestión: "Después de leer mucho, creo que ellos pensaban que eso no podía durar mucho, que en algún momento pararía". Sin embargo, aquella situación duró demasiado tiempo. Al final, "se salvaron los cobardes, los valientes se quedaron".