La operación de la Guardia Civil se ha llevado a cabo en el marco del Plan Mayor de Seguridad y se ha saldado con cinco detenidos , todos varones jóvenes de origen español, integrantes de un grupo criminal que actuaba en Madrid y en varias localidades de la Marina Alta y Marina Baixa mediante el timo de hacerse pasar por revisores de la compañía de la luz.
La investigación arrancaba en julio, cuando la Guardia Civil detectó un incremento de robos y hurtos en domicilios de Calp y otros municipios de la Marina Alta y Baixa. El modus operandi siempre era el mismo: seleccionaban a sus víctimas, todas rondando los 80 años de edad, vía telefónica y con la promesa de abaratarles la factura concertaban una cita para acudir al domicilio de la víctima. Una vez allí, uno de los miembros distraía a la víctima, y el resto de la banda desvalijaba la vivienda. Si la víctima descubría el fraude, no dudaban en usar la violencia física. También usaban ganzúas o falsas llaves para acceder a viviendas cuando no estaban sus habitantes.
La banda estaba compuesta por cinco varones españoles de edades comprendidas entre los 28 y 30 años de edad, a los que se imputa más de una decena de robos y hurtos en viviendas en diversas localidades, entre ellas Calp, donde tenían su residencia en una vivienda ocupada y La Vila Joiosa. Los agentes detuvieron a los cinco componentes, tras una investigación que los ubicaba en una vivienda okupa de Calp, al conocer que estaban a punto de abandonar la vivienda de Calp y mudarse a otro lugar.
El Juzgado de Guardia de Denia ha decretado la puesta en libertad provisional de los miembros de la banda, a los que se prohíbe salir del país debiendo presentarse periódicamente en los Juzgados.
