Este jueves
comienza en Castilla-La Mancha una temporada de caza atípica que, como en otras
muchas actividades, viene marcada por la pandemia del coronavirus. Desde APROCA
se espera una campaña muy dura debido a que se espera un descenso importante en
el número de cazadores, sobre todo los que procedentes de Madrid y del
extranjero, por culpa de la Covid-19.
Ciudad Real | 08.10.2020 14:08
El presidente regional de la Asociación de Propietarios Rurales para la Gestión Cinegética y Conservación del Medio Ambiente (APROCA), Luis Fernando Villanueva, asegura en Onda Cero que la actividad social cinegética seguirá, pero la actividad comercial será durísima.
Los cazadores extranjeros no vendrán a Ciudad Real y a Castilla-La Mancha debido al coronavirus y a esto se une a la situación de Madrid, comunidad desde donde suelen venir muchos cazadores todos los años y que ahora no lo harán.
De hecho, en los primeros quince días de temporada
cinegética ya se han cancelado más de 50 monterías en Castilla-La Mancha.
La actividad de la caza se va a desarrollar bajo un protocolo de medidas anticovid, sobre todo en lo que respecta a la parte social como desayunos, sorteos o comidas que tendrán que celebrarse al aire libre, mesas con un número limitado de personas, distancia de seguridad y uso de mascarillas.
Luis
Fernando Villanueva ha hecho un llamamiento a las administraciones para que
adopten medidas en favor de la caza y de los cotos, ya que la falta de
cazadores en esta temporada puede provocar un problema en el control de
especies que puede suponer daños en la agricultura y en el medio ambiente y
accidentes de tráfico.
El
presidente de APROCA-Castilla-La Mancha recuerda que la caza también supone una
renta importante en el medio rural y es una actividad que en la región mueve
650 millones de euros al año.
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