Felipe VI ha estado acompañado durante esta visita por el presidente de Castilla-La Mancha, Emiliano García-Page; por el ministro de Agricultura, Pesca y Alimentación, Luis Planas, y por el presidente de Fenavin y presidente de la Diputación Provincial de Ciudad Real, José Manuel Caballero, entre otras autoridades.
El rey ha llegado al recinto ferial de Ciudad Real, que en esta edición estrena novedosas instalaciones tras haber sido construido en los últimos años, donde ha descubierto una placa conmemorativa de su inauguración oficial.
Posteriormente ha visitado varios stand de la feria, entre ellos el de la cooperativa Virgen de Las Viñas de Tomelloso (Ciudad Real), donde durante unos minutos ha compartido con su presidente, Rafael Torres, unas impresiones sobre la situación del sector.
Así lo ha indicado el propio Torres a Efe, quien ha comentado que el rey se ha interesado por conocer las novedades del mercado del vino español y compartir con los productores la realidad e inquietudes del sector vitivinícola.
Durante su recorrido por la feria, que cuenta con una superficie expositiva de más de 30.000 metros cuadrados, Felipe VI ha tenido la posibilidad de saludar a bodegueros y representantes de cooperativas y compradores del vino que se dan cita en este importante evento comercial.
En este recorrido también se ha detenido ante el stand de Bodegas Félix Solís, donde ha saludado a su presidente, Félix Solís, y el de la Denominación de Origen La Mancha, donde ha intercambiado también algunas palabras con el presidente de la DO, Carlos David Bonilla.
Finalmente, el rey también se ha detenido en el stand de la bodega Majuelos Iberia, de Aranda del Duero (Burgos).
Con esta visita, los organizadores de la feria han querido que el monarca conozca la feria en profundidad y, sobre todo, se "empape de lo que es la realidad del sector del vino en Ciudad Real, Castilla-La Mancha y España", ha dicho el presidente de Fenavin, José Manuel Caballero.
Los organizadores de la feria se han mostrado muy optimistas sobre los resultados comerciales finales que puede arrojar esta feria, en la que este lunes, antes de su inicio, ya se habían cerrado 7.460 contactos comerciales entre compradores y vendedores de vino, 200 más que en la edición de 2019.
Todo ello, les permite pensar que el volumen de negocio que se puede gestionar durante estos días, les lleve a superar la horquilla de 45-53 millones que se estimaron se produjeron en la anterior edición de Fenavin.
El rey también ha visitado una de las joyas de Fenavin, la 'Galería del Vino', que está considerada la mayor sala de catas de vino del mundo.
En sus 1.600 metros cuadrados de superficie expositiva, se pueden degustar estos días 1.436 referencias de vino, de la que 473 son vinos ecológicos, que revelan que la tendencia del mercado actual se mueve hacía vinos que son producidos de manera sostenible.
En ella, el presidente de Fenavin, José Manuel Caballero, y el sumiller Custodio López Zamarra, le han hecho entrega de un catavinos y un delantal de sumiller, en el que se podía leer la inscripción "Su majestad el Rey, embajador del vino".
Finalmente, el rey Felipe VI ha mantenido en la propia feria una audiencia con una representación de la Cámara Oficial de Comercio, Industria y Servicios de Ciudad Real.
Durante este encuentro, ha recibido de manos del presidente de la Cámara de Comercio, Mariano León, la Gran Cruz de la Cámara de Comercio de Ciudad Real que los empresarios le otorgaron en 2021.
El Rey, ha compartido y brindado con un vino con representantes de bodegas, cooperativas e instituciones de Ciudad Real, Castilla-La Mancha y España.
Esta es la primera vez que el rey ha visitado Fenavin, aunque ya estuvo en 2010 como príncipe, junto a la princesa Letizia, en la tercera edición de la Feria Nacional de las Denominaciones de Origen y Otros Productos Agroalimentarios de Calidad "España Original", que también organizaba la Diputación Provincial de Ciudad Real.
