El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, ha decidido posponer su viaje a Polonia, que tenía previsto hacer este jueves y viernes a Polonia, ante el peligro de la votación en el Congreso del decreto de medidas económicas y sociales de la guerra en Ucrania.
Detrás de la decisión de Sánchez estaría la duración del Pleno en el que se votará, entre otros, decreto ley para el que el Gobierno no tiene en este momento garantizado los apoyos. En las últimas horas ha ido creciendo el nerviosismo en las filas socialistas porque no han convencido las explicaciones que esta mañana daba en el Congreso la ministra de Defensa, Margarita Robles.
Sánchez debería haber llegado a Moldavia hacia las 16.00 horas para reunirse con la presidenta, Maia Sandu, junto a la primera ministra del país, Natalia Gavrilita, para visitar un centro de acogida de refugiados ucranianos. Desde Moncloa aseguran que se está trabajando para buscar fechas próximas de cara a la reanudación del viaje del presidente, quienes también han añadido el reiterado apoyo de España a los países fronterizos con Ucrania.
La aprobación está en el aire
La ausencia del líder del Ejecutivo en el pleno habría restado un voto favorable a la convalidación en una votación que puede ser ajustada, ya que ni el PP ni socios habituales del Gobierno como ERC han desvelado aún el sentido de su voto.
Los populares piden acepte alguna de sus propuestas contra la crisis para apoyar el decreto del Gobierno y Esquerra ya le ha advertido de que puede retirarle el apoyo si no da explicaciones, se asumen responsabilidades por el supuesto espionaje a dirigentes independentistas y se crea una comisión de investigación parlamentaria.
Aunque desde el Gobierno confían en que ERC, con los que se reunirá esta noche para saber su voto, no rechace el plan de choque o en que el PP se abstenga al menos para facilitar su convalidación.
Hasta el momento han confirmado su apoyo el PNV (6 diputados), el PDeCAT (4), Más País-Equo (2), Compromís, Nueva Canarias y el PRC, con un voto cada uno. Con los 154 de PSOE y Unidas Podemos (un voto menos por el escaño no repuesto tras la inhabilitación de Alberto Rodríguez, pero contando con el apoyo de Meri Pita, que se ha pasado al Mixto), el Ejecutivo puede dar por hecho un total de 169 votos, a solo siete de la mayoría absoluta.
