Que el árbol no nos impida ver el bosque. Esa frase hecha está hoy por hoy en la mente de todos los valencianistas. El valencianismo disfrutó con su equipo en la victoria ante el Sevilla pero tiene el temor de que pudiera servirle como excusa a Peter Lim para no reforzar convenientemente el equipo.
Peter Lim sigue teniendo bloqueada cualquier incorporación mientras no se les dé salida en forma de traspaso a Marcos André, Samu Castillejo y Racic. Esa es la orden recibida desde Singapur pese a que la Dirección Deportiva insista en reforzar el equipo. Y sin el visto bueno de Lim poco o nada se puede hacer.
De los tres objetivos del Valencia en este mercado solo Selim Amallah disputó unos minutos en la victoria de su equipo, el Real Valladolid, ante el Sporting de Gijón. El centrocampista disputó 22 minutos al sustituir a Iván Sánchez. Por su parte Rafa Mir no jugó ni un solo minuto con el Sevilla aunque sí estuvo en la convocatoria y Sergi Canós ni se vistió de corto en el empate a dos goles del Brentford ante el Tottenham.
Así las cosas desde la Dirección Deportiva del club se trabaja contrarreloj para dar salida cuanto antes a los descartes de Rubén Baraja (Marcos André, Samu, Racic y Cömert) sabedores que hasta que eso no llegue no se desbloqueará la llegada de ningún refuerzo. De todos ellos, Sergi Canós con quien ya existe un acuerdo con el futbolista y su club podría ser el primero en llegar.
