Los de Zidane salieron más que enchufados al encuentro. Presionando arriba y con robos de balón peligrosos arriba, que crearon más de una ocasión de gol.
Marco Asensio, de hecho, en el minuto 5, dispuso de la primera pero su disparo se marchó desviado. Tal vez, hay que exigirle a Asensio marcar este tipo de ocasiones, ya que son las que cambian el encuentro y las que le dieran ese paso más para consolidarse como jugador importante en el Real Madrid. No obstante, hay que decir que el balear estuvo participativo.
Sin embargo, pasado el cuarto de hora, llegaron otra vez las malas sensaciones europeas blancas de esta temporada, que precisamente siempre llegan en estos minutos en los que el rival hace gol y empiezan los nervios y el sentimiento de crisis. Ese que provocaba pitadas en el Santiago Bernabéu y que provoca debates en la prensa. Tampoco ayuda mucho el hecho de jugar en el Di Stéfano.No obstante, este partido sí que se notaba algo diferente en el equipo de Zidane y en el minuto 25 fue Karim Benzema el que adelantó a los blancos. Acharf Hakimi cometió un error increíble y cediendo el balón a su portero, creó una ocasión de gol a Benzema que el francés no falló.
Sergio Ramos marca su gol número 100
Además, en el minuto 33, Sergio Ramos, con un cabezazo al primer palo tras un córner botado por Kroos, amplío la ventaja blanca, demostrando una vez más su importancia en el juego blanco, no sólo defensivamente, también en ataque.
Pero esta alegría duro poco en el Di Stéfano, ya que instantes después una pérdida en el centro del campo, acabó con un gol de Lautaro Martínez.
Se puede exigir más a Asensio y Benzema
En la segunda mitad, el Real Mardrid empezó a controlar el partido como le gusta a Zidane con posesiones de balón largas arriba subiendo y bajando el balón. Mantenía el 4-3-3 y mediada la segunda mitad, Zidane arriesgó y buscó velocidad y aire fresco con Vinicius y Rodrygo Goes.
Habría que señalar que tanto Hazard como Marco Asensio son dos jugadores que pueden y deben hacer mucho más en el Real Madrid. Tienen calidad de sobra para ello y es deber de Zidane hacerles más desequilibrantes y mejorar también su contribución goleadora. Y ojo porque ahí puede tener la temporada Zidane.
Sin embargo, cuando todo tenía buena pinta, llegó el duro golpe. Perisic marcó para el Inter de Milán y sembraba el caos, después de una segunda mitad muy desdibujada del Real Madrid.
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Decidieron Rodrygo y Vinicius
Parecía que Zinedine Zidane había cometiendo un grave error con el cambio y que el Inter iba a apretar y complicar la Champions. Sin embargo, como viene siendo habitual, esta temporada, Vinicus Jr. explotó por banda izquierda y colocó un centro, al que llegó, Rodrygo Goes que un potente derechazo mandó el balón a la red y puso la Champions de cara al Real Madrid, que con este resultado consigue empatar a cuatro puntos con el Shakhtar Donest.
