Solo seis minutos después de que concluyera la rueda de prensa de la vicealcaldesa de Valencia Sandra Gómez en la que acusaba al Valencia de mentir, se producía una reunión entre el alcalde Joan Ribó y la presidenta del Valencia CF Layhoon acompañada de Kiat Lim, hijo de Peter Lim y nuevo consejero valencianista.
Al acabar la reunión Ribó afirmaba que "les he transmitido que el pasado 16 de noviembre les enviamos dos fichas urbanísticas. Una referente al nuevo Mestalla con unas condiciones y otra del antiguo con otras condiciones. Les he planteado que nos den respuesta porque es algo fundamental. El Ayuntamiento quiere que se acabe el estadio lo más pronto posible pero queremos tener seguridad jurídica de que se hace en las condiciones adecuadas y por eso estamos trabajando en estas fichas y después trabajaremos en el nuevo convenio".
Insistía el alcalde que "no hay ninguna voluntad de postergar el inicio de la construcción del estadio sino que queremos trabajar para que se acabe. Este estadio a medio construir no es una buena imagen para la ciudad y cuanto antes pueda desaparecer, mejor. De esto hemos hablado y ellos han quedado en dar respuesta porque la pelota está en su tejado. Tienen que dar respuesta a esas fichas".
Y al respecto de las declaraciones del Director Corporativo del Valencia, Javier Solís en las que reconocía la existencia de ese documento pero la falta de concreción afirmaba que "la concreción vendrá después de que se acepten o negocien unas condiciones. Daremos la licencia del terciario del nuevo Mestalla cuando esté el compromiso del polideportivo. En el caso del antiguo Mestalla se darán licencias vinculadas al comienzo de las obras. Faltan concreciones pero deben respondernos a partir de eso. Lo que quiero es que se haga el estadio y buscaremos todos los caminos legales y seguros para que se haga el estadio. Yo trabajo para que se haga el nuevo estadio".
