MENSAJE DE "TRANQUILIDAD"

La CHJ no prevé restricciones de agua de uso urbano en 2024 pero recomienda ahorro: "Estamos empezando la sequía"

Sí puede haber algún "problema puntual" en municipios pequeños que se abastezcan "de algún manantial o pozo" por la falta de lluvias

Núria Moreno

València | 12.04.2024 14:45

Una vecina coge agua de un depósito instalado en la plaza de su pueblo.
Una vecina coge agua de un depósito instalado en la plaza de su pueblo. | EFE/Carlos García/Archivo

La Confederación Hidrográfica del Júcar (CHJ) no prevérestricciones en el abastecimiento urbano de agua para este año, aunque de cara al verano sí que pueden registrarse "problemas puntuales" en algunos municipios pequeños, sobre todo "entre los que se abastecen de pozos o manantiales en los que ha bajado el nivel por las lluvias escasas".

Así lo ha explicado este viernes la jefa de la Oficina de Planificación Hidrológica, Arancha Fidalgo, que ha lanzado "un mensaje de tranquilidad", aunque ha recomendado a los ayuntamientos de más de 20.000 habitantes que apliquen los protocolos y apliquen campañas de ahorro: "Estamos empezando la sequía, es el primer año que se nota esa disminución de precipitaciones, y si esto dura varios años empezará a ser más grave".

Una de esas medidas puede ser "bajar la presión para gastar menos agua o recomendar la ducha en lugar del baño", ha apuntado Fidalgo, al tiempo que ha reconocido que, dada la situación, "no sabemos cómo va a evolucionar".

La CHJ ha convocado este viernes a cerca de 700 ayuntamientos a una jornada titulada 'De qué hablamos cuando hablamos de sequía' en la que ha informado a los consistorios e interesados de la situación actual de sequía prolongada y escasez hídrica, de la gestión que realiza el organismo en estas situaciones.

Por su parte, el presidente de la CHJ, Miguel Polo, ha apuntado que con las lluvias de Semana Santa se ha ganado en volumen total embalsado, más de 100 hectómetros cúbicos que es "el equivalente a lo que consume València y su área metropolitana en un año", pero ha matizado que se ha almacenado solo en el sistema del Júcar y algo en el Turia, por lo que los sistemas que "estaban en mal estado, en situación de emergencia, siguen estando en esa situación".

Así, las zonas más afectadas son el interior de Castellón, en municipios como Canet lo Roig, que son "habituales por la propia geología de la provincia", y las comarcas de la Marina Alta por "la falta de precipitaciones importantes", aunque este déficit es "breve en el tiempo, no como la situación de 2016 cuando se arrastró una sequía más larga que provocó problemas serios en algún municipio".