La Dirección General de Emergencias del Govern balear coordina desde este miércoles un dispositivo para reforzar la vigilancia de medidas COVID-19, especialmente en zonas de ocio y turísticas, según ha informado la consellera de Presidencia, Función Pública e Igualdad, Mercedes Garrido.
En una rueda de prensa, Garrido ha indicado que los datos sobre sanciones registrados hasta la fecha les permiten identificar zonas "donde han sido más frecuentes los incumplimientos". En este sentido, se insistirá en la zona metropolitana de Palma y Vila.
También se reforzará la presencia en hoteles, donde se vigilarán zonas comunes, y establecimientos de oferta complementaria; y también se vigilarán zonas recreativas de montaña. Además, los ayuntamientos pueden cerrar zonas si consideran que concurren razones de seguridad, ha recordado la consellera.
Garrido ha indicado que se ha diseñado este dispositivo ante la previsión de que aumenten las actividades sociales esta Semana Santa. "Es lógico que con más tiempo de ocio y buen tiempo las personas se relajen y tengan más ganas de reunirse. Entendemos que todos estamos cansados y queremos salir, pero también tenemos que entender que no nos podemos relajar de ninguna de las maneras", ha declarado la consellera, insistiendo en que el objetivo es evitar tener que dar marcha atrás en la desescalada.
En el dispositivo participarán tanto fuerzas y cuerpos de seguridad como inspectores del Govern y los Consells. Además, en zonas amplias, como playas, se utilizarán drones para vigilar desde el aire; en caso de detectar aglomeraciones, se dará aviso a la Policía Local que corresponda para que intervengan.
Este dispositivo se llevará a cabo en todas las islas y municipios, si bien se pondrá el foco en las "zonas tradicionales de ocio".
La consellera ha incidido en que "todo el mundo debe cumplir" las medidas "sea cual sea su nacionalidad". También ha pedido "máxima colaboración" a los establecimientos, para que insistan a sus clientes en que cumplan medidas y que se respeten los aforos de las terrazas, entre otros ejemplos.
3,3 MILLONES EN PROPUESTAS DE SANCIÓN
La consellera ha insistido en que todas las denuncias se están tramitando y que las sanciones que se impongan se cobrarán; si no es voluntariamente, a través de la Agencia Tributaria. Hasta la fecha se han levantado 33.000 actas y se han registrado 14.920 denuncias: 10.826 en Mallorca, 2.572 en Ibiza, 1.294 en Menorca y 228 en Formentera.
La mayoría de las denuncias (unas 13.000) son contra particulares, si bien son los establecimientos los que suman la mayor parte del importe de las multas. Hay propuestas de sanción por valor de 3,3 millones de euros, de las que 2,5 millones son contra establecimientos.
Garrido ha defendido que la voluntad del Govern no es "recaudar" sino "hacer cumplir la norma". "Muchas veces, para hacer cumplir, las sanciones deben ser elevadas", ha apostillado. Por otro lado, a preguntas de los periodistas, la consellera ha informado de que el expediente por el acta del 'Hat Bar' está en tramitación.
SALUD PIDE PRUDENCIA
Por su parte, la consellera de Salud, Patricia Gómez, ha pedido "prudencia". "Vienen de días de fiesta y ya hemos tenido esta situación otras veces", ha recalcado.
Gómez ha anticipado que se espera un incremento de casos en los próximos días, pero que del comportamiento de la ciudadanía dependerá "que sea moderado, mínimo, o por contra, muy elevado".
Además, la consellera ha sostenido que las medidas "responden a la evidencia científica, no son ocurrencias".
Por otro lado, ha recordado las medidas en vigor para la Semana Santa, en la que los encuentros sociales y familiares están limitados a seis personas de dos núcleos en espacios públicos -cuatro si es la terraza de un bar-, y no se permiten reuniones de no convivientes en domicilios y otros espacios privados como habitaciones de hotel. Gómez ha incidido en que los encuentros sociales son "uno de los principales riesgos" para la transmisión del virus, especialmente en espacios cerrados.
