Las patronales "rechazan las declaraciones de varios representantes parlamentarios o del gobierno del Estado en torno un pretendido adoctrinamiento e incitación al odio desde las aulas escolares".
Para los representantes de la concertada, estas acusaciones "ponen en duda la acción de la comunidad educativa, afectando especialmente la dignidad de los docentes", y "están bien lejos de la realidad que se vive en las aulas de las escuelas de Cataluña".
"La escuela concertada no ha adoctrinado a nadie. Al contrario, ha sido un espacio de tolerancia, de integración y de libertad, un espacio de renovación pedagógica y de igualdad de oportunidades (...)", señala.
"Si algo necesita, no son polémicas que inciten a la confrontación estéril y perjudicial entre las personas, sino más apoyo, más reconocimiento del trabajo hecho, una financiación pública adecuada y más confianza en las personas implicadas en el día a día de las escuelas", argumentan.
Las concertadas afirman que contemplan "con inquietud las medidas adoptadas últimamente por el Gobierno del Estado" y piden que les dejen "continuar trabajando en paz y por la paz".
El manifiesto lo firman las patronales Agrupació Escolar Catalana, Associació Profesional Serveis Educatius de Catalunya, Confederació de Centres Autònoms d'Ensenyament de Catalunya, Federació Catalana de Centres d'Ensenyament de Catalunya, Fundació Escola Cristiana de Catalunya, Confederació Cristiana d'Associacions de Pares i Mares d'Alumnes de Catalunya, Federació d'Associacions de Pares i Mares d'Alumnes d'Escoles Lliures.