José Hernán A. e Iván G., de 34 y 21 años, respectivamente, aprovechaban la popularidad de sus perfiles en redes sociales, Instagram o TikTok, para atraer a menores de edad a su piso del distrito de Villa de Vallecas y después agredirlas sexualmente.
Así lo detallan fuentes policiales, que aseguran que llevaban desde agosto captando a niñas. En su domicilio las hacían partícipes de diversos juegos en los que consumían estupefacientes. Uno de ellos, el conocido como 'chorri' o GHB, una sustancia habitual en sumisión química para anular su voluntad.
Presumían de los hechos con vídeos en WhatsApp: "Soy un depredador"
Según cuenta El Mundo citando a fuentes policiales, los acusados llegaron a difundir vídeos con conocidos a través de WhatsApp en los que se jactaban de sus "conquistas". "Yo paso vídeos fornicando si queréis, eh... Soy un depredador" o "solo follo yo, ¿queréis vídeo?", fueron algunas de las palabras que utilizaban para presumir de los hechos.
Fue en diciembre cuando la Policía tuvo conocimiento de las agresiones después de personas del entorno de los influencers presenciaran los hechos en repetidas ocasiones e interpusieran denuncias para iniciar las pesquisas de la investigación. Una vez comenzó el caso, los agentes encontraron en la red vídeos de víctimas que relataban lo sucedido y señalaban a los acusados.
Además, los agentes obtuvieron un vídeo de agresiones sexuales a través de una tercera persona que había recibido el documento de gente cerca a los hechos, lo que permitió incriminar de manera directa a los Petazetaz.
Los testimonios de los vecinos: "Se veía que eran niñas"
'Espejo Público' de Antena 3 ha hablado con varios vecinos del bloque donde los acusados practicaban estas agresiones. "Muchas veces me los he cruzado, siempre había una niña fuera del portal", ha contado Alejandra, que también ha reconocido que todos los vecinos hablaban de que veían "mucha gente entrar" y se podía ver a "muchas chicas menores": "Se veía que eran niñas".
Otros afirmaban que han escuchado "cosas muy malas" de los acusados, que les contaban que estaban invitadas al piso porque había "más amigos" cuando en realidad solo se encontraban ellos en el domicilio.
Delitos de agresión sexual y cinco víctimas por el momento
A los acusados se les imputan dos delitos de agresión sexual -más uno en grado de tentativa-, cinco contra la salud pública y otros de violación, exhibicionismo y pornografía infantil.
En ese momento era principalmente José Hernán quien les proponía mantener relaciones sexuales, mientras que Iván solía estar presente en el momento en el que consumían droga, pero salía de la estancia en el momento de las agresiones, salvo en una ocasión. Se le imputa un delito de agresión sexual.
A estas cuatro víctimas se les suma una quinta que fue localizada en el domicilio de los arrestados en el momento del registro y que manifestó a los agentes que había podido eludir la agresión de los detenidos.
No obstante los investigadores del Grupo XXII de la Unidad de Atención a la Familia y la Mujer (UFAM), a cargo de la bautizada como operación Network, no descartan que puedan identificar a más víctimas.
Además están pendientes del volcado del material informático intervenido en el registro -dispositivos de almacenamiento, móviles y cámaras instaladas en el salón de la vivienda-, con el que esperan obtener nuevas evidencias.
El pasado 24 de enero los agentes culminaron la operación con la detención de ambos hombres. Un juzgado de Madrid dejó en libertad a Iván y decretó el ingreso en prisión de José Hernán, que sin embargo salió de la cárcel la pasada semana.
