Los regantes del Camp d’Elx que se nutren del agua del trasvase Tajo-Segura han apelado ya este martes a la intervención, a modo de medicación directa, del presidente del Gobierno Pedro Sánchez para dar una solución a la problemática suscitada en torno al trasvase a raíz de la intención del Ministerio para la Transición Ecológica de incrementar el caudal ecológico en la cuenca del Tajo hasta los ocho metros cúbicos en 2026 y a los 8,65 un año después, finiquitando con ello el trasvase para regadío.
Representantes de los agricultores de la provincia se han reunido en Valencia con el presidente de la Generalitat, el socialista Ximo Puig y a la conclusión de ese encuentro Javier Berenguer, presidente de Riegos de Levante, que también es vicepresidente del Sindicato Central de Regantes del Acueducto Tajo-Segura, ha sido rotundo a la hora de asegurar que los agricultores entienden que “sólo” la mediación del presidente del Gobierno puede dar al traste “con la intención de la ministra Teresa Ribera de acabar con el trasvase”.
Por su parte, el presidente de la Generalitat ha destacado que el gobierno valenciano y los regantes tienen el mismo objetivo, que es que el plan de cuenca del Tajo que apruebe el Consejo de Ministros a principios del próximo año recoja el acuerdo votado el pasado mes de noviembre en el Consejo Nacional del Agua, que señalaba, ha dicho Puig, que el caudal ecológico no se incrementaría más allá de los siete metros cúbicos por segundo hasta evaluar en el año 2025 los resultados de las mejoras en el tratamiento de agua que se van a impulsar en la zona de Madrid.
Movilización en enero en Madrid
Tras la reunión con el presidente del gobierno valenciano que se ha celebrado en Valencia, los regantes se movilizarán el próximo 11 de enero ante el Ministerio para la Transición Ecológica en Madrid.
Mientras los representantes de los regantes eran recibidos por Ximo Puig, a las puertas del Palau de la Generalitat, donde se ha celebrado la reunión, se ha producido una concentración de agricultores.
