Para ello, se ha llevado a cabo un proceso participativo en el que se han recogido las aportaciones del área de Medio Ambiente del Ayuntamiento, las compañías de suministros de energía, empresas de transporte, el sector de la construcción, comercio e industria azulejera, así como la participación de ONGs locales y otros representantes de la sociedad civil.
El plan recoge varias líneas de acción para lograr una reducción de las emisiones de Gases de Efecto Invernadero, aumentar la energía renovable; y mejorar la eficiencia energética.
En este sentido, se pretende llevar a cabo el cambio de luminarias de la vía pública por tecnología LED, la instalación de placas fotovoltaicas en edificios públicos en los que sea posible, renovar la flota municipal de vehículos por otros que utilicen combustibles alternativos y la instalación de puntos de recarga para vehículos eléctricos, entre otras acciones.
