La campaña de vacunación contra el coronavirus arrancará este domingo de manera simbólica, con la administración de las primeras dosis en tres residencias de mayores, en Zaragoza, Huesca y Teruel. Se hará de forma simultánea, con el resto de comunidades autónomas y otros países europeos. Esas primeras dosis de Pfizer llegarán a Aragón ya descongeladas, para poder ser utilizadas de forma inmediata.
Después, a lo largo del mes de enero, se recibirán unas 60.000 dosis que se almacenarán en el Hospital Clínico y se irán distribuyendo a los 123 centros de salud. El objetivo es administrar unas 12.000 cada semana. De momento, hay 45 residencias con brotes activos, donde habrá que retrasar la vacunación.
En el resto de centros, se seguirá un procedimiento que hoy ha detallado el gerente del Salud, José María Arnal: "Cada día de lunes a jueves, las dosis saldrán del centro de salud para llegar a cada residencia. Los viernes se realizará un rescate, vacunando a las personas que no hayan podido hacerlo en días anteriores".
Aunque más adelante podría contratarse a más personas, de momento la campaña se llevará a cabo con la plantilla habitual y los refuerzos que se incorporaron en junio a los centros de salud. No van a recibir una formación presencial, pero se les han facilitado guías técnicas y otros materiales para que puedan prepararse.
Los responsables de Salud Pública confían en que más del 80% de los mayores en residencias se pongan la primera dosis en enero. Después, se vacunará a los profesionales sanitarios y socio-sanitarios que trabajen próximos al virus y, hacia finales de febrero, comenzará la vacunación de otros colectivos de riesgo, que tendrán que citarse en su centro de salud. Empezarán por los mayores de 80 años y, a continuación, será el turno de los mayores de 65.