En esas imágenes, grabadas por un testigo desde un punto elevado y con visión directa, se distingue a un individuo moviéndose sobre la azotea de un edificio del campus de la Universidad de Utah. Esa localización coincide con la hipótesis oficial: el disparo que acabó con la vida del influyente referente del trumpismo habría sido efectuado desde unos 180 metros de distancia.
El vídeo muestra cómo la persona, cuyo aspecto encaja con la descripción difundida por las autoridades, domina visualmente el anfiteatro donde unas 3.000 personas escuchaban a Kirk responder preguntas del público. El sospechoso viste completamente de negro, igual que el perfil facilitado por la policía, y consiguió huir de la zona sin ser detenido.
La investigación continúa abierta. El FBI ha confirmado que el arma utilizada en el ataque, un rifle de gran capacidad, ya está en su poder y está siendo analizada junto a las huellas recogidas en la escena. Por el momento, el autor material sigue en paradero desconocido, y las fuerzas de seguridad han solicitado la colaboración ciudadana para dar con él.
Los vídeos que circulan por las redes
Según pasan las horas se multiplican los vídeos sobre el supuesto tirador que ha asesinado a Kirk.

