Van den Eynde se ha desplazado hoy a la cárcel madrileña de Estremera, donde ingresaron los siete hombres exmiembros del Govern (las dos mujeres están en Alcalá Meco) para los que la magistrada Carmen Lamela ordenó prisión, para visitar a sus defendidos.
Tras una hora de visita, el letrado ha considerado "desproporcionada" al decisión de Lamela, como hará constar en el recurso que ya prepara contra el auto de ayer.
Además, se ha mostrado convencido de que la salida de España del expresident de la Generalitat Carles Puigdemont y de otros exconsellers, que están en Bélgica, no ha influido "para nada" en la decisión de la jueza.
"La decisión hubiera sido igual en cualquier circunstancia, si se hubieran ido fuera de fin de semana o al extranjero", ha dicho el abogado antes de precisar que la resolución "habla por sí misma" y la va a recurrir.
Ha subrayado también que sus clientes están "tranquilos y firmes" pese a una situación "muy dura" que no se debe, a su juicio, relativizar, sobre todo en cuanto a la conducción hasta la cárcel de los detenidos.
En su opinión, es un "punto negro" ya que la conducción, según él, se realiza en "un espacio de bastante impunidad" con "determinadas conductas no muy regulares de trato y maltrato a detenidos y presos", ha dicho.
De todos modos, ha insistido en que sus clientes están bien, preocupados por su familia y "por la gente de Cataluña y España" y "firmes" para salir adelante, esperando que "les demos apoyo desde fuera".