El G7 incluye a Nadia Calviño entre los aspirantes a dirigir el FMI

Los países europeos buscan una candidatura de consenso para no perder la dirección del FMI, el principal organismo económico del mundo que siempre preside un europeo desde la Segunda Guerra Mundial.

Nadia Calviño, la ministra de Economía española, ha sido la primera en mover ficha. Cuenta con el apoyo del Gobierno y el G7 -el grupo de países más ricos del planeta- ha dado acuse de recibo.

En Chantilly, donde se reunían los titulares de finanzas del G7, el ministro francés, Bruno Le Maire, espera lograr antes de finalizar el mes un candidato de consenso.

"Una candidatura europea de consenso que sea sólida, creíble y que permita a Europa seguir dirigiendo el FMI", ha dicho.

El Gobierno español dice que hay que unificar esfuerzos para establecer el nombre del sustituto de Christine Lagarde, que dejará el cargo el 12 de septiembre.

El problema es que Calviño no es el único nombre que suena. Hay otros y de peso, como el holandés Jeroen Dijsselbloem, que ya paró en seco a Luis de Guindos cuando este quiso presidir el Eurogrupo.

También suena el gobernador del Banco de Inglaterra, Mark Carney, pero este es canadiense. Y otro peso pesado es Olli Rehn, gobernador del Banco de Finlandia que, cuando fue comisario de Economía europeo, intervino a favor de rescatar al sistema financiero español.