La Asociación Valenciana de Agricultores y la Unió de Llauradors i Ramaders han exigido, en una reunión, a Mireia Mollà, Consellera d’Agricultura, y al secretario autonómico, Roger Llanes, que realicen, en este tramo final de la legislatura, un “esfuerzo” y que den “respuesta urgente a las principales problemàticas a las que se enfrenta el sector agrario valenciano”. En especial, han pedido medidas para que los precios que perciban los agricultores estén por encima de los costes de producción.
Ambas organizaciones consideran que, de la hoja de ruta que presentaron hace dos años, todavía quedan muchos aspectos que no se han tratado. Por ejemplo, la creación de una AICA (Agencia de Información y Control Alimentarios) que realice un registro de todos los contratos de compraventa. Además, este organismo también debería estudiar y hacer públicos los costes medios de producción de los principales cultivos y ganaderías; a parte de contar con un observatorio de precios que haga un seguimiento continuo de las campañas de comercialización.
En relación con la nueva ley de gestión de residuos, ambas entidades han solicitado que, en el futuro reglamento, se especifique y se solucione el problema de los restos agrarios mediante trámites y autorizaciones simplificados que no supongan una carga burocrática a los agricultores.
Por otro lado, también han abordado el crecimiento incesante de la fauna salvaje. El aumento provoca pérdidas que superan los 35 millones de euros en el sector agrario y ganadero de la Comunitat Valenciana.
