El próximo uno de enero a las 00:00 se cumple un año desde que la autopista AP-7 entre Alicante y la provincia de Tarragona dejara de ser de pago. Para celebrar este aniversario, autoridades del Estado, Generalitat y ayuntamientos han celebrado un acto en el antiguo peaje de Ondara-Denia.
La delegada del Gobierno en la Comunitat Valenciana, Gloria Calero, ha recordado que la liberalización de la AP-7 “ha dado paso a la mayor transformación de la movilidad de la Comunitat Valenciana en 50 años”, una medida que “ha supuesto a los usuarios un ahorro estimado de 300 millones de euros en el último año”, al tiempo que ha detallado los innumerables beneficios que ha traído.
“El Gobierno de España se comprometió a que las concesiones cuyo plazo acabara no se iban a prorrogar ni se iban a volver a licitar, para que, de esta forma, las infraestructuras pasaran a manos de la Administración y dejasen de gestionarlas concesionarias privadas para evitar perpetuar los desequilibrios territoriales y la desigualdad entre la ciudadanía en función de su lugar de residencia”, ha declarado Calero.
Beneficios sociales
Para Calero “es evidente que los beneficios sociales más importantes de la utilización de la AP-7 son, y han sido, los ahorros de tiempo de viaje”, pues “un menor tiempo de viaje permite a los viajeros realizar otras actividades más productivas, así como la seguridad vial y el ahorro económico”.
La delegada del Gobierno ha detallado que el sector del transporte por carretera es uno de los más beneficiados tras la finalización del peaje en los 374 kilómetros entre Tarragona y València. “La gratuidad ha supuesto un importante ahorro para los transportistas de la Comunitat Valenciana, cuantificada entre 2.000 y 2.500 euros por vehículo”, según ha explicado la Delegada.
Asimismo, para los particulares y autónomos que utilicen regularmente, o al menos una vez al mes, el trayecto completo de la autopista el ahorro se sitúa en torno a los 600 euros anuales. Mientras, el ahorro estimado de las familias de la Marina Alta que se desplazan habitualmente a València, Alicante u otras ciudades de la costa se sitúa entre los 250 y 350 euros anuales.
Apuesta del Gobierno
“El Gobierno de España ha apostado desde el primer momento por una movilidad más segura, rápida, fiable y económica, no solo para la ciudadanía sino también para nuestras empresas. Y a la apuesta de la gratuidad del mayor nudo de transporte terrestre y que vertebra nuestra Comunitat Valenciana como es la AP-7, se une la apuesta decidida por el Corredor del Mediterráneo con lo que conseguiremos situar al territorio valenciano como una autonomía puntera en las comunicaciones y competitividad empresarial”, ha relatado la delegada.
Al acto celebrado esta mañana en el antiguo peaje de Ondara han asistido el conseller de Política Territorial, Obras Públicas y Movilidad, Arcadi España; la subdelegada del Gobierno en Alicante, Araceli Poblador, y los alcaldes y alcaldesas del norte de la comarca de la Marina Alta, así como representantes de distintas mancomunidades.
La liberación en cifras
El pasado 31 de diciembre de 2019 finalizó la concesión de los tramos Tarragona-València y València-Alicante de la autopista AP-7. Por tanto, a partir de las 00:00 horas del 1 de enero de 2020 la gestión de las mismas ha correspondido al Ministerio de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana.
La longitud total es de 373,7 km, con el siguiente desglose:
• Tarragona: 86,4 km
• Castellón: 120,5 km
• València: 88,1 km
• Alicante: 78,7 km
La intensidad meda diaria (IMD) del total de vehículos en el tramo València - Alicante durante los meses de junio a octubre de 2020, son los siguientes:
• Total: 30.843
• Pesados: 2.380
• No pesados: 28.463
En 2019 entre junio y octubre la IMD fue la siguiente:
• Total: 24.346
• Pesados: 1.217
• No pesados: 23.129
Por lo tanto se produce un incremento general del 26,68 por ciento, mientras que el incremento de IMD en vehículos pesados ha sido del 95,56 por ciento y el incremento de la IMD en vehículos no pesados ha sido del 23,06 por ciento.
El Gobierno ha destacado que la situación generada por la pandemia ha significado una modificación de la movilidad que distorsiona la comparación de este año con relación al anterior.
El futuro de la AP-7
El MITMA está redactando dos estudios previos (uno por tramo: Tarragona-València y València-Alicante) con objeto de estudiar la distribución de la demanda de tráfico tras la supresión de peaje en la Autopista AP-7 y evaluar la necesidad de actuaciones en la Red de Carreteras del Estado al cambiar las condiciones de explotación de esta vía.
Estos datos permitirán determinar las mejores soluciones para las actuaciones que se deban acometer para acomodar la demanda en la Red de Carreteras del Estado tras la redistribución de tráfico que se ha producido tras la supresión del peaje de la AP-7, tales como la remodelación de enlaces existentes o la implantación de otros nuevos, estableciendo su programación.
