Ya intuíamos que no iba a ser un partido fácil frente a la Real sociedad a pesar de jugarse en casa y de la sensibles ausencias que tenía el equipo de Imanol Alguacil, David Silva y Mikel Merino, entre otras. Pero el plantel realista está realizando una grandísima temporada y posee muchos y buenos futbolistas entre ellos sin ir más lejos un nuevo canterano como Pablo Marín, que ayer realizó un magnífico partido.
Y en estas, surgió Ousmane Dembélé con una actuación tremendamente decisiva, de gran líder de equipo, de crack mundial y de lo que siempre se ha esperado del jugador normando. Al fin, Dembele rompió el frasco de las esencias y realizó un partido completo desde el principio hasta el final.
Fue una pesadilla para el rival, desbordó una y otra vez y generó infinidad de situaciones comprometidas para la defensa donostiarra a la par que dió muchas opciones a sus compañeros en el ataque. Este es el Dembele que necesita el Barça. Este es el Dembele que apuntaba en el Borussia de Dortmund y que llegó con la vitola de megaestrella, apagándose por mor de las lesiones, pero que parece renacer con fuerza, sentirse importante y verse como uno de los líderes naturales de este equipo. Su actual madurez puede ser fundamental para ayudar a conseguir los objetivos que faltan en lo que resta de temporada..
El Barcelona sufrió demasiado cuando la Real Sociedad se quedó con 10 jugadores. Volvió el mal endémico de un partido completo que no se cierra. Fueron 60 minutos brillantes hasta el gol de Dembélé y 30 minutos y regulares en los que un muy buen equipo, en inferioridad, tuvo las mejores oportunidades del encuentro
Y ahí es donde surge la otra gran figura de la eliminatoria , el portero alemán Ter Stegen, que ratificó la gran temporada que está haciendo y el acierto del entrenador a la hora de decidir que fuera él quien defendiera la portería del equipo era un encuentro tan trascendental. El Barcelona ha encontrado ya su línea defensiva su equipo de Gala, incluso su sistema de juego con cuatro centrocampistas y con Gavi ayudando a Dembele y Lewandowski con libertad de movimientos. Se sufrió más de lo debido sobre todo por la superioridad numérica pero se cumplió el objetivo que al fin y al cabo era lo importante.
El Barcelona ya está en semifinales a las puertas de disputar otro título más que con una muy buena liga, pueden convertir el año en un cambio definitivo de la hegemonía del fútbol español
