Nacido en San Sebastián por cuestiones laborales de sus padres, Hugo Guillamón es uno de esos jugadores que ha ido escalando categoría a categoría tanto en el Valencia como en la Selección hasta llegar a lo más alto. Tras una gran temporada en su club su esfuerzo se vio recompensado con el Mundial pero después de la cita mundialista vio como su participación en el conjunto che disminuyó notablemente hasta perder su lugar en la absoluta.
A veces hay que dar un paso atrás para avanzar dos y de eso Hugo sabe un rato. Se trata de un luchador incansable y el Europeo puede devolverle la sonrisa tras un año complicado. Solo ha disputado 1680 minutos con su club y en los últimos diez partidos en los que el Valencia se jugaba la permanencia no ha jugado ni un minuto en nueves encuentros (en el último ante el Betis disputó ocho minutos).
Bordalás le reconvirtió de central a centrocampista y gracias a ello ha mejorado mucho su juego con balón, algo esencial para el seleccionador, Santi Denia, que tiene plena confianza en él. Del ostracismo en Qatar y en el Valencia pasa a ser el líder de la defensa en la Sub-21 y todo seguramente bajo la atenta mirada de Luis de la Fuente.
