Tras la salida de Monchi, el Sevilla busca un nuevo inquilino para el puesto de Director Deportivo. Tras las operaciones fallidas con Víctor Orta y Braulio Vázquez, el siguiente en la lista es David Cobeño. El máximo responsable de la parcela deportiva en el Rayo Vallecano tiene contrato en vigor y, por tanto, si el Sevilla quiere hacerse con sus servicios tendrá que pagar la cláusula. El exjugador de Real Madrid, Rayo Vallecano y Sevilla, entre otros, ocupa el puesto de Director Deportivo en la entidad rayista desde hace seis años.
El Rayo no se plantea su salida
El Rayo Vallecano se encuentra sumido en la búsqueda de entrenador tras la confirmación de la salida de Andoni Iraola. Es una temporada ilusionante, con el centenario como argumento, y en el Club se espera mantener el bloque de la plantilla actual y realizar incorporaciones ilusionantes para suplir las bajas de Catena, Fran García y Comesaña. Para ello, lo primero es buscar un entrenador y en esa labor se encuentran el propio Cobeño y el presidente, Raúl Martín Presa. Por este motivo, el Rayo Vallecano no se plantea la salida de Cobeño en este momento. Si el Sevilla quiere hacerse con sus servicios tendrá que hacer frente a una cláusula de rescisión que, fuentes consultadas por Onda Cero, niegan que sea de 400.000 euros. Esas mismas fuentes aseguran que estaríamos hablando de una cantidad multiplicada por diez, respecto a esa cifra.
Enfado con el Sevilla
Desde que se ha conocido la noticia del interés del conjunto andaluz en hacerse con los servicios de David Cobeño, en el Rayo Vallecano la noticia ha sorprendido. Pero ha sorprendido aun más que nadie del Sevilla se haya puesto en contacto con el Rayo para conocer la situación contractual de Cobeño. En el Rayo entienden que para hablar sobre el futuro de un trabajador con contrato en vigor, deben dirigirse primero a ellos. Es por esto que, si en el Rayo tienen conocimiento de conversaciones, se plantean denunciar al Sevilla por incumplir la normativa. De hecho, ya ha habido contactos entre ambos equipos.
