emisiones

El Ayuntamiento de Gijón y la Federación de Asociaciones Vecinales han abordado dos de los proyectos presentados a las convocatorias de fondos europeos: la renaturalización de los ríos Piles y Peñafrancia, y la implantación de una zona de bajas emisiones en La Calzada. El concejal de Medio Ambiente, Aurelio Martín, y el presidente de la FAV, Manuel Cañete, coinciden en considerar la renaturalización del Piles “un proyecto de ciudad” que implicará la generación de nuevos espacios para los vecinos y favorecerá la biodiversidad.

La Generalitat ha pactado con los alcaldes de los ciudades catalanas de más de 20 mil habitantes ampliar la zonas de bajas emisiones (ZBE) en todos estos municipios antes de que acabe el 2025. Son 67 municipios los que estarán obligados a restringir la circulación de los vehículos más contaminantes.

Se ha convocado a un foro a los agentes implicados para avanzar medidas que permitan reducir las emisiones, con objetivos más ambiciosos que los establecidos en la estrategia aragonesa de cambio climático.

Considera que la base deben ser las zonas Acire extendidas por la ciudad

Comenzará funcionar en 2023 y solo podrán circular los vehículos con distintivos cero, eco, C y B, mientras que a partir de enero de 2025 se eliminarán los distintivos B

El Ayuntamiento de Ciudad Real comenzará a partir del año 2023 la implantación paulatina de las medidas contempladas en el proyecto de Zona de Bajas Emisiones que pondrá en marcha en todo el interior de rondas gracias a una subvención de 2 millones de euros de fondos europeos.

El Ayuntamiento de Ciudad Real obtendría más de 2.000.000 de euros para la implantación de la “Zona de Bajas Emisiones (ZBE): interior rondas” según la resolución provisional de la Secretaría General de Transportes y Movilidad sobre las ayudas a municipios para la implantación de zonas de bajas emisiones y la transformación digital y sostenible del transporte urbano, en el marco del Plan de recuperación, transformación y resiliencia.

Las restricciones afectarán inicialmente y hasta 2025 a los vehículos diésel de antes de 2006 y gasolina de antes de 2001, un 28% del total

A partir del 1 de enero, los vehículos más contaminantes no podrán entrar en la almendra central de Madrid, aunque sí podrán circular por el momento por la M-30.

Las medidas puestas en marcha en la ciudad han logrado cumplir con creces el objetivo marcado para este año de reducir un 20% los gases invernadero. El Gobierno municipal trabaja para avanzar en el uso de las energías que vengan de energías renovables y la auto eficiencia.