Ángel Víctor Torres, presidente de Canarias: "El volcán ha emitido 20.000 toneladas de dióxido de azufre hasta el momento"

A lo largo de la noche las autoridades de La Palma han tenido que continuar con las evacuaciones de vecinos de las zonas más próximas al volcán de la Cumbre Vieja. En concreto, según ha avanzado en 'Más de uno' la alcaldesa de Los Llanos, se tuvo que desalojar al barrio más cercano al municipio de El Paso, donde estaban las bocas del volcán, y a última hora de la noche se ha desalojado el barrio de La Laguna, principalmente por prevención.

Vigilar la evolución de las coladas de lava

En las próximas horas, las autoridades deben vigilar la evolución de las coladas de lava. "La prioridad es que no haya nadie en el camino de la lava hacia el mar y vigilar que no se produzcan incendios que suelen estar asociados a las erupciones volcánicas", explica el presidente de Canarias, Ángel Víctor Torres.

A pesar de que el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, se comprometió ayer a reparar cuanto antes cualquier daño material producido por el volcán, el presidente canario lamenta los "graves daños materiales" y la contradicción que supone el dolor de los vecinos evacuados junto a lo que es un fenómeno natural. "Canarias no existiría de no haber habido volcanes", reflexiona Ángel Víctor Torres.

Se han emitido 20.000 toneladas de dióxido de azufre

Hasta el momento, el volcán ha emitido 20.000 toneladas de dióxido de azufre y con los nuevos sistemas de medición se podrá calcular entre hoy y mañana cuándo puede acabar la erupción. "En estos momentos, las predicciones hablan de unos 20.000 millones de metros cúbicos de magma", explica el presidente de Canarias, aunque puntualiza que los datos serán actualizados sobre las 13:00 horas (horario canario) después de la reunión del comité de expertos.

No hay que lamentar daños personales

"El alivio fue que erupcionó en una zona no poblada porque había gran miedo de que pudiera dirigirse a una zona poblada", dice Ángel Víctor Torres sobre la erupción que se ha producido a una gran velocidad. Sin embargo, gracias a la coordinación de las autoridades competentes y a la "magnífica colaboración ciudadana", hoy en día no hay que lamentar daños personales.