Plan contra el tabaquismo

Los médicos quieren que el precio de la cajetilla de tabaco suba a 12 euros

"España tiene que dejar de ser el estanco de Europa", insisten, con una tributación para el tabaco del 51% frente al 80 ó 90% que es lo habitual en el resto del continente.

Belén Gómez del Pino

Madrid |

Dejar de fumar es siempre una buena opción
Dejar de fumar es siempre una buena opción | Andres Siimon//Unsplash

¿Dejaría usted de fumar si la cajetilla de tabaco subiera hasta los 12 euros? ¿Los pagaría? En Irlanda, el país de la Unión Europea con el precio más alto, llevan años haciéndolo, con más de 13 euros por 20 cigarrillos. Más cerca nuestro, Francia, decidió el pasado mes de diciembre elevar el precio de la cajetilla hasta esa frontera de los 12 euros y en Gran Bretaña el Daily Mail anunció hace unas semanas un proyecto para aumentar el precio por paquete de los 14 euros actuales hasta 23 euros (20 libras) supone algo más de un euro por cigarrillo. En España, el precio medio es de 4,5 euros

La medida económica es una de las bazas más solicitadas por los médicos españoles para luchar contra un hábito cuyas cifras permanecen estables. Según el Ministerio de Sanidad, en nuestro país el 23% de la población mayor de 15 años fuma a diario, el 2,4% es fumador ocasional y el 25,7% se declara ex fumador.

Triplicar el precio del tabaco impactaría en el número de fumadores

Aumentar el precio de la cajetillas, calcula la Sociedad Española de Medicina Familiar y Comunitaria (SemFYC), "conseguiría una reducción del hábito de fumar de entre un 10 y un 15%". Aprovechando la sintonía con el Ministerio de Sanidad, que parece decidido a desempolvar la Estrategia contra el Tabaquismo en la que se trabaja desde hace años, la Organización Médica Colegial (OMC) ha elaborado un documento con 20 medidas para promover el control del tabaquismo y avanzar en su regulación en España.

Entre los pasos propuestos destaca, además de la subida de impuestos, la exigencia de un empaquetado genérico de todos los productos del tabaco (cajetilla blanca, sin marcas comerciales), la prohibición de los sabores añadidos al tabaco y la prohibición de "fumar en espacios públicos compartidos como terrazas de restauración, playas, colas, etc."

Una colilla contamina hasta 50 litros de agua

Se incluyen además medidas a favor del medioambiente, como la penalización por arrojar colillas en espacios públicos o exigir a la industria tabaquera los costes de la recogida de residuos. Según un informe de Greenpeace, al combustionar el tabaco, se generan 100 sustancias tóxicas, entre ellas cobalto, aluminio, arsénico, níquel, alquitrán, plomo o estroncio. Estos componentes quedan en las colillas, que tardan una década en degradarse, hasta el punto de que "cada resto puede llegar a contaminar entre 8 y 10 litros de agua marítima y hasta 50 litros de agua dulce".

La hoja de ruta de la Organización Médica Colegial apuesta también por medidas sanitarias como legislar para que centros sanitarios con más de 10 médicos tengan un responsable en la lucha contra el tabaquismo, que se consoliden en la cartera básica del Sistema Nacional de Salud los fármacos autorizados por la Agencia Española del Medicamento para el tratamiento del tabaquismo, así como la terapia sustitutiva con nicotina y la promulgación de medidas para crear generaciones libres de tabaco, incluso señalando una fecha de nacimiento a partir de la cual se prohíba, de por vida, la venta de tabaco.

El tabaco mata a la mitad de quienes lo consumen

El tabaco es responsable del 33% de los tumores y de un 22% de las muertes por cáncer. Causa el 85-90% de los cánceres de pulmón, pero es también factor de riesgo para multitud de tumores (cabeza y cuello, vejiga, tumores digestivos…). El tabaco mata a la mitad de sus usuarios y es responsable de más de 8 millones de muertes al año en el mundo.

Dejar de fumar siempre es una buena idea, sea cuando sea que llegue el momento y la decisión.