El candidato a la presidencia de la Comunidad Autónoma de Murcia, Fernando López Miras, se someterá al debate para su investidura los próximos días 6 y 7 de julio, según ha anunciado este lunes la presidenta de la Asamblea Regional, Visitación Martínez.
López Miras se presenta a la sesión de investidura con el único apoyo manifiesto de su partido, el PP, por lo que cuenta con 21 de los 23 escaños necesarios para tener mayoría absoluta y salir elegido en primera vuelta. De no contar con el apoyo de Vox, tendría que concurrir a una segunda vuelta, que ha quedado fijada para el 10 de julio, en la que solo sería necesaria la mayoría simple de la Cámara.
Vox se siente traicionado
Desde Vox aseguran que se sienten traicionados y que no le van a el sí. El secretario general de Vox, Ignacio Garriga, ha afirmado que "de momento, a día de hoy López Miras está comprando todo los boletos para una investidura fallida".
En este sentido, ha subrayado que la situación en la Región de Murcia es "muy diferente" a la de otros puntos de España. Ha recordado que en 2019 Vox y PP hicieron un pacto de investidura y López Miras "lo traicionó", e incluso "llegó a gobernar con tránsfugas" del partido de Santiago Abascal. Es decir, "vulneró la confianza" de esta formación y "traicionó la voluntad de los murcianos".
Sin embargo, ha destacado que aún quedan "días por delante" y Vox sigue con la "mano tendida" y dispuesto a "trabajar" y "hablar", a pesar de que el tiempo "corra" y de que "parece que en Génova están dispuestos a usar a Murcia como un laboratorio". Garriga confió en que López Miras recoja la "mano tendida" que su partido mantiene.
Al respecto, esperó que el presidente de la Región de Murcia en funciones "reconsidere su posicionamiento". En este sentido, Garriga comentó que "no tiene más que mirar a algunos de sus compañeros de partido" y se "sume a esas reconsideraciones" en otras comunidades en las que ha habido un acuerdo con el PP y ponga "en el centro" a los murcianos.
