La empresa PHI4TECH mantiene sus planes para iniciar el año que viene las obras de la primera planta de celdas de baterías para coches eléctricos del sur de Europa en la plataforma logística de Badajoz. Así lo ha dicho el consejero delegado de Phi4Tech, Mario Celdrán, en un acto celebrado en la localidad toledana de Noblejas, donde tiene su laboratorio de células de baterías y que albergará su primera planta piloto. Después será el turno de Badajoz cuya primera fase está prevista que se concluya en el 2023. En Extremadura se sumará una fábrica de cátodos en la provincia de Cáceres, y la extracción de litio en Cañaveral y de cobre y níquel en Monesterio. Acto que ha contado con la presencia, entre otros, del presidente de Castilla-La Mancha, Emiliano García Paje y la consejera extremeña de Transición Ecológica, Olga García. El presidente castellano manchego se dirigía a la consejera extremeña de Transición Ecológica y al presidente de la Junta de Extremadura, Guillermo Fernández Vara, asegurando que este tipo de proyectos hacen justicia con las dos comunidades.
La localidad cacereña de Cañaveral tendrá una planta de ingeniería de tratamiento de litio y se decidirá en el mes de julio dónde construirá la fábrica de cátodos para la que se barajan seis localidades más además de Cañaveral, que son Casas de Millán, Navalmoral de la Mata, Malpartida de Plasencia, Arroyo de la Luz, Torrejoncillo y Aldea del Cano. Phi4Tech ha decidido desdoblar este proyecto que, en un principio, estaba unido. Ahora la inversión prevista para la planta de Cañaveral es de 60 millones de euros con una creación de 100 puestos de trabajo, mientras que la fábrica de cátodos tendrá una inversión de 140 millones y creará 260 puestos de trabajo. Está previsto que empiecen las obras a primeros del año 2022.
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