De esta forma, la Tesorería municipal ha confirmado que el consistorio romperá la barrera de los cuatro millones de euros pendientes de pago a largo plazo (4.329.357,32 euros de capital vivo a día de hoy) hasta situarse en los 3,2 millones de euros a finales del ejercicio. Así lo ha anunciado la alcaldesa, Merche Galí, que ha recordado que los 923.352,39 euros que amortizará el consistorio en octubre proceden de un compromiso suscrito en 2014 por el anterior equipo de gobierno para la refinanciación de los créditos firmados.
A la amortización de este crédito de CaixaBank se sumará el vencimiento trimestral de otros 140.000 euros, recogido en las condiciones de los préstamos, y que sumarán más de un millón de euros que las arcas municipales dejarán de adeudar a los bancos. Según Galí la deuda actual es perfectamente asumible y distancia enormemente de los 11,8 millones de euros que llegó a acumular el Ayuntamiento en 2013.