Fue un familiar de una de las víctimas la que interpuso una denuncia ante la Guardia Civil el pasado mes de marzo. Notificó la sustracción de una cadena y un colgante, ambos de oro. En una primera línea de investigación en colaboración con la dirección del centro de mayores, los agentes descubrieron otros dos hechos similares por las mismas fechas, que fueron igualmente denunciados por los familiares de otras dos usuarias del centro.
Tras un análisis, los agentes comprobaron que todos los hurtos tenían una conexión entre ellos. Las sospechas condujeron a una mujer española de 44 años de edad y sin antecedentes policiales, empleada de la residencia
Una vez centradas las investigaciones en la sospechosa, los agentes pudieron comprobar que las joyas desaparecidas fueron vendidas en un establecimiento dedicado a la compra y venta de joyas.
El pasado 19 de abril, los investigadores citaron en el Puesto Principal de la Guardia Civil de San Vicente del Raspeig a la principal y única sospechosa, procediendo a su detención, e imputándole tres delitos de hurto.
La detenida junto con las diligencias instruidas fue puesta a disposición del Juzgado de Instrucción de Guardia de San Vicente del Raspeig, quien ha decretado su puesta en libertad con medidas cautelares. La operación continúa abierta y no se descartan que puedan aparecer nuevos perjudicados.
La Guardia Civil recuerda que a través del Plan Mayor de Seguridad y por medio de las charlas informativas que imparte por toda la geografía española, pretende prevenir y mejorar la seguridad de las personas mayores, ya que éste grupo de personas se encuentra dentro del colectivo considerado especialmente vulnerable.
