Con Robert Calvo analizamos la vida de Concepción Velasco Varona, conocida artísticamente como Concha Velasco para todo un país. Fallecía el pasado 2 de diciembre, a los 84 años, en el Hospital Universitario Puerta de Hierro Majadahonda (Madrid). Actriz, cantante, presentadora, protagonista de 7 décadas de la historia del espectáculo de un país, pisaba su primer escenario con 15 años.
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Una mujer de provincias, de Valladolid, de la que hemos visto su transformación como artista, como mujer y como persona. Una chica Yeyé que se convirtió en mito del pop en un país, en aquel momento, cerrado al exterior.
“A mí se me va una madre, pero a España se le va la mejor artista del siglo XX, su artista más importante”. Así se expresaba Manuel Velasco, uno de sus hijos, en la capilla ardiente instalada en el Teatro La Latina de Madrid.
Empezó en el mundo del espectáculo a los 15 años
El espectáculo corría por sus venas desde la cuna. Estudió danza clásica y española en Madrid, en el Conservatorio Nacional de los 10 a los 20 años. A los 15 años empezó a participar como figurante en películas y con 19 años protagonizó su primer éxito en la gran pantalla: “Las chicas de la Cruz Roja”.
Durante el final de la dictadura, luchó por salir de los papeles encasillados en los que se sentía atrapada. Trabajo a las órdenes de Pedro Olea (Tormento, Pim, pam, pum ¡fuego! y Más allá del jardín), Mario Camus (La colmena), Josefina Molina (Esquilache) o Luis García-Berlanga (París, Tombuctú).
El cine no fue su única pasión, también consiguió triunfar en el mundo de la televisión. Una de sus primeras apariciones fue en Estudio 1, en TVE, interpretando a Doña Inés en “Don Juan Tenorio”, junto con Paco Rabal. Protagonizó una de las series más míticas de la televisión; “Teresa de Jesús”, una de sus primeras apariciones en este formato hasta “Compañeros”, a finales de los 90.
Artista polivalente y versátil
Su eclosión en televisión, como presentadora, se produjo terminados los años 90, con programas como “Querida Concha”, el concurso “Queridos padres”, o el mítico “Encantada de la Vida”. Pero, sin duda, uno de sus trabajos más importantes fue presentando uno de los programas más relevantes de la televisión, “Sorpresa-Sorpresa”. La propia Concha Velasco reconocía que fue uno de sus grandes éxitos de su carrera.
“El Funeral”, una obra escrita y dirigida por su hijo, Manuel Velasco, le brindó la oportunidad de volver a los escenarios. Y en esta, la artista afirmaba que era una forma de concienciar al público y a su familia, sobre la muerte.
El mundo del espectáculo pierde a una referente y a una mujer que ha dejado un legado enorme. Siempre nos sacará una sonrisa cuando la recordemos cantando “Mamá, quiero ser artista” o “Chica Ye-Ye”.
