Alrededor de 5.000 jóvenes participaron en una macro fiesta en Saltacaballos, en Castro Urdiales. Una discoteca de esta localidad acogió este festival (como los propios organizadores lo publicitan) que comenzó a las 9 de la mañana del sábado, y que terminó a primeras horas del domingo. Hasta 36 DJs pincharon en este evento con tres programaciones paralelas y un escenario situado en un prado lleno de asistentes, y situado al borde de un acantilado.
El cuerpo policial supo durante la semana que se estaba planificando esta fiesta, y diseñó un operativo de seguridad para evitar altercados. Aseguran que su presencia es la razón de que no se hayan producido altercados. A pesar de ello, los agentes identificaron a más de 1000 jóvenes de entre 18 y 22 años, que llegaron en 230 coches y 6 autobuses procedentes del País Vasco, Navarra, La Rioja y la provincia de Burgos. Aunque durante las semanas anteriores los perfiles en redes sociales de este festival anunciaban hasta 10 rutas de autobús diferentes: la mitad procedentes de Euskadi, y entre las demás, una con orígen en Zaragoza y otra que cubría Torrelavega, Santander y Laredo.
Los agentes formularon hasta 160 denuncias administrativas contra los asistentes. La gran mayoría por tenencia de estupefacientes, pero también por portar armas blancas, positivos en alcoholemia y por faltar al respeto a agentes de la autoridad.
En redes sociales, los organizadores se enorgullecen del éxito de la convocatoria y anuncian otro evento similar para el próximo día 18 de junio.
