La empresa familiar

La patronal balear de la empresa familiar no ve viable aplicar la "prueba" de los cuatro días laborales a la semana

La Asociación Balear de la Empresa Familiar ABEF, que preside Esther Vidal, ha celebrado hace poco su asamblea general para sondear los ánimos entre sus asociados. La asociación que agrupa a las empresas familiares que, a su vez, representan el 80% del tejido empresarial de las islas, no ve realista trabajar cuatro días a la semana.

Elka Dimitrova

Baleares | 16.12.2022 16:10

Hace dos semanas que la Asociación Balear de la Empresa Familiar ABEF celebró su asamblea general donde reclamó a los políticos, entre otras cosas, reducir las tensiones y más transparencia… Y no ha sido así.

Lo ha denunciado en Onda Cero la presidenta de la ABEF, Esther Vidal, que se muestra aún más sorprendida por los últimos conflictos entre instituciones al más alto nivel en España. Preguntada por el momento económico actual y las previsiones para el 2023, la presidenta de la asociación balear de la empresa familiar augura un buen año que viene en lo turístico y, por tanto, en lo económico, pero "no mejor que este 2022". Además de la incertidumbre actual, inflación y guerra en Ucrania, Vidal ha añadido un factor desestabilizador más que preocupa al tejido empresarial: las desavenencias entre China y Taiwán.

A las preguntas de Elka Dimitrova en el programa Más de Uno Mallorca, Esther Vidal ha puesto como ejemplo el sector del automóvil al que se dedica ella en la empresa privada. Asegura la presidenta de IBEF que los fabricantes de coches y, por tanto también los distribuidores, han seguido sufriendo la crisis de suministros que, tal y como estaba previsto a finales de este año, no se ha solventado. El problema persistirá a lo largo del 2023, según prevé.

La empresa familiar en Baleares que conforma el 80% del tejido empresarial pide a las administraciones certidumbre y que por fin haga fluir los fondos europeos para que las empresas puedan usar los Next Generation comprometidos.

Sobre las ayudas propuestas por el Gobierno central a las empresas que quieran probar su nivel de productividad y la eficiencia de los trabajadores, empelando cuatro días de la semana laboral, explica Esther Vidal que lo ve improbable en la pequeña empresa.