2025 ha sido un año de "incertidumbre" para el sector agrícola y ganadero en Aragón, marcado principalmente por las enfermedades ganaderas y los daños climáticos. Es uno de los aspectos en los que ha incidido ASAJA en su balance del año agrícola. Enfermedades como la lengua azul, peste porcina, dermatosis nodular o gripe aviar han hecho de este año uno de los peores años en lo sanitario. Sin embargo," el buen hacer, la seriedad y el rigor" de los ganaderos aragoneses ha impedido que las enfermedades entren en las explotaciones, ha destacado Ramón Solanilla, secretario general de Asaja Aragón. "Se ha afrontando con eficacia el reto de la sanidad animal y convirtiéndose en un ejemplo de actuación", ha añadido.
Desde ASAJA se hace un llamamiento al control de la fauna silvestre, que está provocando daños directos en agricultura y que es vector en la transmisión de enfermedades. Se pone el ejemplo de los jabalíes y la peste porcina. ASAJA defiende la importancia de la biodiversidad pero sometida a un control racional.
Solanilla ha destacado la grave afección en los precios del sector porcino con una pronunciada bajada desde el pasado octubre. En general los precios han acompañado en la ganadería pero sólo para la supervivencia de las explotaciones y no para ayudar a que se haga efectivo el relevo generacional. "Se ha frenado algo la caída en el número de ejemplares de ganado ovino pero no el descenso en la cifra de ganaderos", ha subrayado Solanilla que insiste en que sigue sin ser una actividad atractiva para los jóvenes.
En cuanto a los cereales de secano y regadío, la cosecha ha sido histórica, sin embargo los beneficios no han ido a la par, ha señalado el presidente de ASAJA Fernando Luna. "La gran productividad agrícola de este año contrasta con el escaso rendimiento económico, dados los altos costes de explotación y los precios finales de venta", ha añadido. Luna considera que el sector cerealista demanda ayuda institucional y ha mostrado su preocupación por la situación de los cultivos del sur de la provincia por la escasez de agua. En este sentido ha lamentado nuevamente se hayan vertido al mar miles de hectómetros cúbicos de agua por falta de capacidad de almacenamiento.
Por otro lado, el año 2025 ha sido uno de los ejercicios con mayor siniestralidad agraria en la última década debido a la frecuencia e intensidad de las tormentas. En Aragón la superficie siniestrada ha sido de 218.000 hectáreas, con 550 municipios que han sufrido daños. En la provincia de Huesca, los daños se han concentrado en cultivos de maíz y herbáceos, fruta y uva.
ASAJA participará este jueves 18 de diciembre en la manifestación que se ha convocado en Bruselas en contra de los planes comunitarios. Insisten en que la soberanía alimentaria es tan importante como la inversión en defensa

