ENTREVISTA EN JULIA EN LA ONDA

Judith Arnal cree que topar precios no es la solución a la crisis de vivienda: "Hace falta un gran pacto de Estado"

Judith Arnal es economista, investigadora principal en el Real Instituto Elcano y consejera independiente del Banco de España, con ella hablamos de la Geoeconomía y la caída de todas las ortodoxias políticas y económicas.

Nerea Pardillo

Madrid |

Judith Arnal es economista, investigadora del Real Instituto Elcano y consejera independiente del Banco de España. A sus 39 años ha trabajado en Bruselas y tiene un currículum apabullante. Con Julia Otero ha hablado de Geoeconomía y de la situación actual del mundo, aunque ha querido dejar claro que las opiniones y análisis económicos vertidas durante la entrevista son personales y ajenos a su puesto como consejera del banco de España.

Uno de los temas que ha abordado en la entrevista es la crisis de la vivienda que está atravesando España. En términos económicos, para Arnal "hay un problema de oferta". "Habría que aumentar la oferta pública y privada", ha señalado. Por contra, cree que el mercado "no" se puede controlar. "Las soluciones de topar precios no cumplen los propósitos buscados", por ello considera que "hace falta un gran pacto de Estado".

Arnal asegura que "pensaba que lo había visto todo", pero que después de la crisis generada por la pandemia de la covid-19, la inflación y crisis energética por la invasión de Rusia a Ucrania y ahora la guerra arancelaria de la mano de Trump "parece que en 15 años hemos vivido siglos".

La última década, para los economistas, es "apasionante"

Judith Arnal terminó la carrera en 2009, justo un año después de comenzar la crisis económica del 2008. Este hecho le sirvió porque le ayudó a decantarse por sus próximos pasos. "Tenía claro que quería opositar y es lo que hizo que me decantara por Técnico comercial y Economista del Estado". Después, comenzó a trabajar en 2012, "en plena crisis financiera" cuando se produjo el rescate al sector bancario español.

A su juicio, el economista John Kenneth Galbraith, gran crítico de la teoría económica clásica, a día de hoy "estaría asustado". Aunque "todas las décadas han tenido lo suyo", pero para los analistas la última que estamos viviendo "es apasionante" y eso que, en la década de los 70, fue "complicada" por los shocks inflacionistas del petróleo o los pactos del Estado en España.

Todo está cambiando a una gran velocidad y las viejas normas ya no sirven en muchas ocasiones. Lo mismo pasa en la economía. "Eso que parece que se está desmontando el mundo, en concreto de la mano de la Administración Trump, a mi juicio se inició hace 20 años". Según Arnal, aunque no considera culpable a China, todo cambió cuando se produjo la adhesión de este país a la Organización Mundial del Comercio (OMC).

Desde ahí, distintas administraciones estadounidenses de distinto signo político empezaron a tomar medidas. Por ejemplo, en 2001 impusieron aranceles al acero, en 2006 a importaciones textiles chinas y en 2016 no renovaron a un miembro en el órgano de Apelación de la OMC. Aunque esto parece algo técnico, "no lo es", porque este órgano garantiza que "la OMC puede resolver disputas", ha explicado Arnal.

A Trump lo peor que podría pasarle es conseguir lo que pretende

China es un país muy importante a nivel de mercados europeos. Esto explica las decisiones de los 27 a nivel comercial, como cuando se tomó la decisión de introducir a vehículos eléctricos importados de China, que no fue una decisión unánime". "El problema es que la demanda interna China está muy baja", porque allí tienen una crisis interna, por lo tanto, nuestro problema es "donde colocamos los productos" si China está en esa situación.

"A Trump lo peor que podría pasarle es conseguir lo que pretende", ha opinado Arnal. Para ello, ha puesto el ejemplo de un iPhone. Si consigue repatriar todos los procesos a Estados Unidos, el precio triplicaría. "Habría un impacto sobre la inflación y el poder adquisitivo del consumidor estadounidense", y en ese país el consumo privado es un 70% de su PIB.

Según la economista, la incertidumbre actual se debe "a la tecnología". "El crecimiento económico futuro va a depender de ganancias de productividad que va a depender de quién domine las tecnologías". China ya domina el grafeno, las baterías de litio, los drones civiles y militares... "Estados Unidos no lo quiere tolerar", ha argumentado. "El dominio de las nuevas tecnologías está determinando las tensiones que estamos viendo", ha añadido.

Europa tiene que espabilar

En términos de seguridad económica, Arnal que no está a favor del proteccionismo, no cree que haya que cerrarse al mundo, pero "hay que distinguir en función del sector y del grado de criticidad de una información. Ver cuándo podemos confiar en la tecnología de otros países y cuándo hay que apoyarse en tecnología propia". Por eso, "Europa tiene que espabilar. (...) Tenemos que impulsar que nuestras empresas implementen en sus procesos las nuevas tecnologías" y ser más productivas.

Asimismo, ha avisado que la UE no tiene que replicar ningún modelo, como el de Silicon Valley, sino encontrar "nuestra propia vía".

Sobre la inteligencia artificial, Europa no va a llegar en 2028 al nivel económico que ha movilizado META en estos momentos, por eso Arnal opina que "podemos brillar en términos de modelos éticos y democráticos". Sin embargo, tal y como ha recordado Julia Otero, que apoya el proteccionismo, está avanzando, por eso piensa que es fundamental "mucha didáctica y narrativa para enseñar los riesgos del proteccionismo".