El bono cultural joven llegó a España en 2022 como impulso económico para los jóvenes que van a cumplir 18 años y en un intento de que este sector de la población descubriera la cultura al adquirir determinados productos del sector.
Según cifras del Gobierno, se concedieron alrededor de 273.000 ayudas, mientras que la iniciativa se incluyó también en los Presupuestos Generales del Estado de 2023, con una partida de 210 millones de euros.
Cómo pedir el bono cultural joven: requisitos para solicitar la ayuda
Se trata de una ayuda directa de 400 euros que se cargan en una tarjeta prepago virtual con el nombre del beneficiario. Para solicitar el bono cultural, se puede realizar de dos maneras:
- Presencial: en la web del bono cultural joven se puede solicitar a través de Correos, cumplimentando un formulario que hay que presentar en una oficina de Correos junto con el DNI.
- Online: también en la web del bono cultural se puede solicitar identificándose con el Certificado Digital o el sistema de Cl@ve.
Cabe recordar que el requisito imprescindible para recibir el bono cultural es ser un joven que cumpla 18 años en 2023, con nacionalidad española, residencia legal o solicitante de asilo o protección temporal.
¿En qué se puede gastar el bono cultural joven?
El Gobierno informa de que ya hay más de 2.000 comercios, empresas y entidades adheridas en toda España. No obstante, hay una serie de límites para gastar el bono:
- Hasta 200 euros en artes en vivo: conciertos, artes escénicas, cine, museos, bibliotecas, exposiciones o festivales.
- Hasta 100 euros en productos culturales físicos: libros, revistas, prensa, videojuegos, partituras, discos, CD, DVD, Blu-ray.
- Hasta 100 euros en consumo digital o en línea: suscripciones a plataformas musicales, lectura o audiovisuales.
El Supremo anula la exclusión de los toros en el bono cultural joven
El Tribunal Supremo ha anulado la exclusión de los espectáculos taurinos del bono cultural joven del Gobierno. El alto tribunal ha estimado el recurso de la Fundación Toro de Lidia contra el real decreto y anula la expresión "y taurinos" del artículo 8.2. que fija las actividades excluidas.
Sin embargo, esta decisión no implica que los toros estén ya incluidos en el bono cultural, puesto que el Ejecutivo puede justificar, ahora sí, de una manera más solida la exclusión.
La Sala argumenta que no hay motivos para excluir estos espectáculos "no nos parecen válidas al efecto las que ofrece su preámbulo ya que únicamente dice que los espectáculos taurinos se fomentan a través de otros instrumentos y que cada Administración tiene capacidad para decidir libremente los sectores o actividades de interés o utilidad pública que fomenta y de qué modo lo hace".
