Con la llegada del buen tiempo, apetecen más los planes con amigos o familia fuera de casa y en toda reunión social, el vino o la cerveza suelen estar presentes.
Ambas son bebidas alcohólicas con una alta graduación y cabe recordar que el alcohol, por lo general, no aporta ningún beneficio para la salud. Razón por la que su consumo siempre debe ser moderado.
En esta línea se pronunció el Ministerio de Sanidad, que el pasado mes de marzo aprobó una nueva estrategia de salud cardiovascular, que incluía -inicialmente- la recomendación de eliminar las bebidas alcohólicas del menú del día de los restaurantes y bares de España. Esta propuesta generó una gran polémica y finalmente se eliminó del documento.
En cualquier caso, no hay duda de que la cerveza y el vino son las bebidas 'fetiche' de los españoles. Así se refleja en la Monografía Alcohol 2021 del Ministerio de Sanidad, según la cual la bebida alcohólica más consumida en España es la cerveza (la toman un 49,5% de hombres y un 28,1% de mujeres); seguida del vino, que lo consumen el 23,3% de los hombres y el 16,1% de las mujeres.
Asimismo, el consumo medio de cerveza por persona al año se sitúa en 52 litros y el de vino, en 28 litros. Expertos de la salud recomiendan no sobrepasar los 40 gramos al día, que equivale a 400 ml de vino tinto para un hombre y 300 ml para una mujer. En el caso de la cerveza, esa cantidad supone 700 ml para hombres o 400 ml para mujeres.
¿Cuál engorda más?
Tanto el vino como la cerveza tienen calorías por el alcohol y el azúcar que presentan en su composición. Sin embargo, por cada 100 gramos, el vino aporta 78 calorías, más del doble que la cerveza, que aporta 33 calorías.
De estos datos se deduce que la cerveza, consumida en la misma cantidad que el vino, engorda menos. Aunqueesta conclusión no es del todo exacta, ya que es frecuente que la cantidad de cerveza que se consume sea mayor que la de vino.
¿Cuál es más saludable?
En cuanto a los beneficios para la salud, habitualmente hemos escuchado que una copa de vino al día puede ser beneficiosa para el organismo ya que reduce el riesgo de enfermedades cardiovasculares y es un potente antioxidante. Sus beneficios provienen de los polifenoles presentes en el vino tinto que reducen la inflamación y limpian las sustancias químicas perjudiciales.
En conclusión, podemos decir que el vino es más saludable que cerveza, aunque, nutricionalmente, esta aporta más proteínas y minerales.
