Canadá

Cientos de manifestantes antivacunas bloquean una carretera limítrofe entre Canadá y EEUU

Los manifestantes llevan días bloqueando la capital, Otawa, con manifestaciones que han llamado "el convoy de la libertad".

ondacero.es

Madrid | 09.02.2022 08:40

Cientos de camioneros y manifestantes canadienses, con banderas y pancartas, han cortado el tráfico del puente que une la ciudad de Windsor, en la provincia de Ontario, con el estado de Detroit, en Estados Unidos, en el marco de las llamadas protestas del 'Convoy de la Libertad', que se oponen a las restricciones de coronavirus en Canadá.

El Departamento de Transporte del estado de Michigan ha trasladado en su cuenta oficial de Twitter que el puente 'Ambassador' ha permanecido cerrado del lado estadounidense y ha recomendado a los conductores usar el cruce de Port Huron, que conecta esta ciudad estadounidense con Sarnia, en Ontario.

Por su parte, la Agencia de Servicios Fronterizos de Canadá (CBSA, por sus siglas en inglés) ha advertido a los viajeros de este corte en el tráfico y les ha recomendado cruzar a la ciudad de Detroit desde Windsor a través de un túnel que se encuentra a unos tres kilómetros al este a lo largo del río Detroit.

"La CBSA reconoce que las interrupciones fronterizas afectan tanto a los viajeros como a la industria y estamos trabajando para restablecer las operaciones fronterizas normales en este puerto de entrada lo más rápido posible", ha dicho en un comunicado, según recoge la cadena estadounidense CBC.

Además, la Policía de Windsor ha señalado en un comunicado que el flujo normal de tráfico de vehículos ha sido interrumpido y que, por el momento, están "monitoreando las manifestaciones a lo largo de la carretera Huron Church".

"La Policía de Windsor respeta los derechos de los canadienses a ejercer su libertad de expresión y reunión pacífica (...) Evite el área, use rutas alternativas y controle nuestras redes sociales para obtener actualizaciones", ha avisado.

La Asociación de Camiones de Ontario rechaza las protestas

Hace menos de tres días, la Asociación de Camiones de Ontario (OTA, por sus siglas en inglés) rechazó las protestas: "Para aquellos en la industria de camiones que han optado por participar en esta protesta, su comportamiento hoy no solo se reflejará en usted y su familia, sino también en los más de 300.000 canadienses que, como usted, se enorgullecen de nuestra industria".

"La OTA no apoya y desaprueba enérgicamente cualquier protesta en caminos públicos, carreteras y puentes. La OTA cree que tales acciones, especialmente aquellas que interfieren con la seguridad pública e impiden el flujo de tráfico o de ciudadanos, no son la forma en que se deben expresar los desacuerdos con las políticas gubernamentales", señaló en un comunicado.

Este domingo por la noche, docenas de policías armados descendieron al aparcamiento del estadio de béisbol Coventry Road, en el este de Ottawa, donde los manifestantes tenían un campamento, para confiscar combustible, vehículos y realizar arrestos tras la declaración del estado de emergencia en Ottawa.

Este mismo lunes, el primer ministro Justin Trudeau aseguró durante un debate de emergencia en la Cámara de los Comunes que los manifestantes trataban de descarrilar la democracia con unas protestas que duran ya cerca de dos semanas.

"Están tratando de bloquear nuestra economía, nuestra democracia y la vida cotidiana de nuestros conciudadanos. Esto tiene que parar (...) La gente de Ottawa no merece ser acosada en sus propios vecindarios", advirtió este lunes el mandatario.

Se levantan las restricciones

En medio del colapso que han producido las protestas, el primer ministro de la provincia de Alberta, Jason Kenney, ha anunciado que levantará algunas restricciones de COVID-19 a partir de esta noche, como la presentación del pasaporte para entrar a locales de restauración o la obligatoriedad de llevar mascarillas en las escuelas a partir de este lunes.

A la medianoche, se eliminarán los límites de capacidad para espacios de menos de 550 personas, incluidas bibliotecas y lugares de culto, así como el consumo de alimentos y bebidas en lugares donde el público esté sentado, que estará nuevamente permitido.

Otros estados se han sumado al levantamiento de restricciones, como Quebec, que ha anunciado que esto se producirá a mediados de marzo, excepto la obligatoriedad de mascarilla y el pasaporte COVID, o el estado de Saskatchewan, en el que a partir del 14 de febrero tampoco se necesitará mostrar el certificado de vacunación para entrar en restauración.

El primer ministro de Quebec, François Legault, al ser preguntado sobre si las decisiones de cara a eliminar restricciones en marzo se han debido a las protestas, a lo que ha respondido negativamente: "La razón por la que nos resistimos hasta hoy fue porque había demasiado riesgo", según recoge CBC.

Por su parte, el primer ministro de la Isla del Príncipe Eduardo, Dennis King, ha anunciado un plan de tres pasos para aflojar las restricciones de COVID-19 en varias fases, siendo el 17 de febrero el primer paso, en el que se contemplan aumentos de aforos y reuniones en interiores y exteriores, principalmente.