No pudo sumar de a tres el Valencia CF en Mestalla ante el Rayo Vallecano, empate a uno que bien es cierto que te saca de los puestos de descenso pero solo por golaverage ya que los de Baraja suman los mismos puntos que el penúltimo y el antepenúltimo, Almería y Espanyol respectivamente, con 27 puntos. Un empate con sabor a poco pero sí que sirvió para retomar mejores sensaciones que las vistas en el último encuentro en el Civitas ante el Atlético de Madrid ya que los valencianistas merecieron mejor suerte para remontar el gol de Comesaña. Se volcaron sobre la portería de Dimitrievsky que se convirtió en protagonista de los madrileños. Una baza a la que el equipo blanquinegro se quiere acoger para viajar hasta el Power Horse Sadium o lo que es lo mismo el Estadio Juegos del Mediterraneo de Almería. Envite que si ya era una final lo es aún más.
Para ese encuentro ya se centra el equipo de Rubén Baraja, olvidando lo sucedido en Mestalla y centrándose en un partido en el que se espera a más de medio millar de valencianistas en las gradas del estadio andaluz.
Rubén Baraja está muy pendiente de Nico González que ayer cayó lesionado en su tobillo y que le impidió saltar al segundo acto en Mestalla y abadonando el estadio con claros signos de cojera con lo que deberá ser sometido a pruebas para determinar el alcance de su dolencia.