El Ayuntamiento de València ha decidido incrementar el control sobre los patinetes eléctricos ante el aumento en el número de accidentes en los que está implicado este medio de transporte. Los siniestros con patinetes involucrados han aumentado en un centenar de casos en el último año en la ciudad. De acuerdo con los datos facilitados este lunes por el consistorio, entre enero y agosto se han producido un total de 623 accidentes con patinetes, frente a los 522 registrados en los mismos meses de 2022.
La intención del Ayuntamiento es realizar nuevas campañas informativas sobre el uso de los patinetes eléctricos, además de intensificar los controles policiales a sus usuarios con el objetivo de reducir la siniestralidad. El concejal de Movilidad, Jesús Carbonell, considera que la legislación para regular este tipo de vehículos va por detrás de la realidad. Por eso el Ayuntamiento -dice- “debe preocuparse tratar de reducir los accidentes”:
En anteriores campañas del Ayuntamiento de València para controlar y sancionar a los usuarios de patinetes buena parte de las denuncias se debieron al uso de auriculares o teléfonos móviles, o a no llevar el casco obligatorio. También abundaron las sanciones por circular por lugares indebidos como aceras, calles sin límite de velocidad a 30 kilómetros por hora, zonas peatonales o carriles bus.
Los jóvenes son los principales usuarios de este medio de transporte. Según datos aportados por el Ayuntamiento hace dos años, casi un 38% de la población entre 16 y 30 años se desplaza en València en patinete eléctrico. Se trata, además, de una franja de edad con una baja percepción del riesgo y en la que en muchos casos los usuarios no tienen carné de conducir.
