El Ayuntamiento de València ha dado por acabados los trabajos de restauración de dos de las chimeneas de principios del siglo pasado que todavía se conservan como vestigios del antiguo pasado industrial de la ciudad. Ambas están situadas en la marginal izquierda del antiguo cauce del Turia, entre el Paseo de La Alameda y la avenida de Baleares, una zona donde en aquella época se instalaron numerosas fábricas. Los trabajos han costado alrededor de 326.000 euros y de ellos se ha encargado una empresa de Albacete especializada en este tipo de intervenciones.
Una de las chimeneas rehabilitadas perteneció a la destilería de la Unión Alcoholera Española y se encuentra en los jardines centrales de La Alameda, a la altura del Parque Gulliver. Además de reforzarla y reparar los daños que presentaba, se le ha instalado un pararrayos y un sistema de iluminación monumental.
La otra destaca por su diseño helicoidal y se encuentra en la calle del escultor Octavio Vicent, algo más oculta a la vista. En este caso perteneció a una fábrica de papel y es la que peor estado de conservación presentaba. De hecho, en 2010 sufrió un desprendimiento de cascotes de la parte superior.
Ambas chimeneas están declaradas Bien de Relevancia Local (BRL) como ejemplo del pasado industrial de la ciudad de València. Estas estructuras eran un elemento básico en las fábricas de finales del siglo XIX y principios del XX, que necesitaban evacuar el vapor que utilizaban para generar energía.
