El artista Ángel Hernández homenajea con la escultura El Vínculo a los profesionales sanitarios

El artista ilicitano Ángel Hernández ha querido rendir tributo al personal sanitario con la colocación de una escultura en el vestíbulo del Hospital Gómez Ulla de Madrid, que es instalará en el mes de noviembre. La obra, titulada El Vínculo, es una pieza trabajada en aluminio pulido con incrustaciones de puntos en resina de colores, mide un metro de dimensión, y se instalará en una peana de granito negro de unos 60 centímetros de altura.

La escultura, que ha sido subvencionada por la Escuela de Interpretación Audiovisual Actores Madrid, pretende ser un homenaje a la dedicación y el valor de los profesionales sanitarios durante estos duros meses de la pandemia. La pieza será instalada a la entrada del Gómez Ulla, hospital pionero en cerrar una planta con los primeros casos de Covid-19 que llegaron a España. El Vínculo mezcla homenaje y recuerdo por la profesionalidad, esfuerzo, dedicación, sacrificio de los que lucharon de manera incansable, pero sin olvidar también a los pacientes, en un intento de inmortalizar los días más difíciles de la pandemia; y también pretende servir de aviso para que se recuerde que la amenaza no ha terminado y que, entre todos, a través de la responsabilidad individual, se logrará estar cada vez más cerca de vencer al virus.

El artista Ángel Hernández destaca que la idea de la obra surgió al constatar “el tremendo esfuerzo personal y colectivo consentido por los profesionales sanitarios que han trabajado en primera línea y que han dado un ejemplo sin precedentes durante esta pandemia”. “Que esta escultura sirva como recordatorio permanente de lo que es capaz el ser humano cuando da lo mejor de sí mismo y que, al mismo tiempo, rinda homenaje a todas esas historias personales”, añade.

El Vínculo también reflexiona sobre el principio de dedicación y amor a los demás. Y añade que los puntos simbolizan la unión de los distintos profesionales y especialistas sanitarios durante estos duros meses. Ángel Hernández añade que su intención es colocar una serie de esculturas en el vestíbulo de distintos hospitales de la geografía española, como recordatorio de la actitud heroica y anónima de los profesionales sanitarios.

La pieza del Gómez Ulla ha sido subvencionada por la Escuela de Interpretación Audiovisual Actores Madrid. Su responsable, Manuel Hernández, subraya que con la instalación de la obra se ha pretendido “honrar a todos los médicos, enfermeros, celadores, conductores... que estuvieron en primera línea durante el confinamiento y que lo siguen estando, y que anteponen el cuidado de la salud a cualquier otra consideración de índole personal”. “Es algo con lo que Actores Madrid quería comprometerse desde el principio de la pandemia”, explica.

Ángel Hernández es escultor, licenciado y DEA en Bellas Artes por la Universidad Politécnica de Valencia. Ha obtenido numerosos galardones y reconocimientos, entre ellos el premio de escultura de la Junta de Comunidades de Castilla La Mancha y el de la Diputación de Jaén. Actualmente, el artista utiliza el aluminio fundido, coloreado o en bruto, para conducirnos a una reflexión sobre la soledad, el consumismo o la construcción desmedida.