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¡Cuidado con las patrullas de Leva!

¿Sabes lo que eran las Patrullas de Leva?

ondacero.es

Castellón | 06.06.2017 17:09

Samuel Scott - David Cordingly et autres, Pirates, terror on the High Seas - from the Caribbean to the South China Sea,
Samuel Scott - David Cordingly et autres, Pirates, terror on the High Seas - from the Caribbean to the South China Sea, | ondacero.es

Bueno hoy vanos a volver sobre la historia de los pobres marineros que embarcaban sin querer en la Armada Británica. Y si, sin querer, porque los atrapaban de noche, les pegaban un estacazo en la cabeza y por la mañana se despertaban en los barcos de la Real Armada Británica, donde estaban obligados a servir, quisieran o no, bajo las órdenes militares del mar. El que escapaba era considerado un desertor.

Las Patrullas de Leva eran los cuerpos especiales de la Armada, que recibían comisión por lograr nuevos marineros para los barcos de guerra.

Hablamos del siglo XVIII. Lo más preciado que tenían los ingleses eran sus grandes buques de guerra. Y el objetivo más buscado, buscarle las cosquillas a la armada Española y apoderarse de cuantos buques españoles pudieran, para ahcerse con los cargamentos de oro y plata que se transportaban desde el nuevo mundo hasta España, para vencer en la guerra que iniciaron Gran Bretaña y España.

Pero las condiciones de vida de los marino eran tan crueles, y tan extremas, que nadie quería embarcarse en estas expediciones. Los barcos cada vez eran más grandes, con más cañones, pero no había marineros suficientes para manejarlos.

Así es que, las Patrullas de Leva tenían la misión de merodear por las zonas portuarias, merodeaban por los puertos, las zona más bajas de las ciudades y atrapar a los infortunados que acababan de finalizar otras travesías, los borrachos, los noctámbulos, que se convertían, de forma involuntaria en siervos y esclavos de Su Real Majestad, la Corona Británica.

Había muchas personas desaparecidas de quienes nunca se volvió a saber, la mayoría de ellos, perecieron en el mar.

También se conseguían marineros en las cárceles, los sanatorios, las zonas que rodeaban las tabernas.

Stephen Bown cuenta en su libro, ‘El Escorbuto’, como en 1741 los británicos armaron una gran expedición bajo las órdenes del comodoro George Anson, para asediar a los españoles en la zona del Caribe y en área colindante a Manila.

Partieron 5 barcos, solo regresó uno . A finales de 1739 España e Inglaterra habían entrado en guerra. La flota tenía que partir por sorpresa, pero la ausencia de tripulantes retrasó varios meses la partida.

Al final, el Ministerio de Marina enroló por la fuerza a los pensionistas del hospital de Chelsea, 500 veteranos de guerras anteriores que estaban lisiados, locos, o demasiado enfermos para participar en activo…

Solucionaron dos problemas, la dotación básica que tenían que tener los buques en cuanto al número de hombres a bordo, y al tiempo, dejaron libres los hospitales para atender a los nuevos heridos que iba a provocar la nueva guerra…

La mayoría de aquellos pensionistas enrolados a la fuerza murieron en el primer tramo del viaje por el Atlántico.