TRADICIÓN CATALANA

Los calçots, el típico plato catalán que conquista a los madrileños

Se inaugura en Collado Villalba la primera edición de la "Calsotada Fest", el festival gastronómico-cultural que busca acercar la cocina del calçot a la población madrileña

Júlia Trullà

Madrid | 17.03.2023 14:37

Llega a Madrid la Calsotada Fest, la primera gran fiesta del calçot en Collado Villalba. Un festival gastronómico-cultural, dirigido a las familias, que se celebrará durante el próximo sábado 25 y el domingo 26 de marzo en el Restaurante Calsot de Hoyo de Manzanares. Durante este encuentro, se podrá degustar el tradicional plato catalán: los calçots.

¿Qué son los calçots?

Los calçots son el brote de una cebolla blanca y dulce, que se cultiva principalmente en Tarragona. Con un cultivo artesanal, la cebolla se va calzando para que los brotes vayan buscando el sol y espigue lo máximo posible. Se queman a la parrilla hasta que la piel está quemada y la cebolla está tierna en su interior. Luego se sirven acompañados de la típica salsa romesco, que es una salsa hecha a base de tomate, ñoras (un tipo de pimiento seco), almendras, avellanas, ajo, sal y aceite de oliva.

Extender la tradición catalana por todo el país

Hace años la gente desconocía por completo qué eran los calçots y la manera correcta de comerlos. La realidad es que ahora los restaurantes que ofrecen en Madrid este típico plato catalán ya cuentan con una gran lista de espera. Los calçots han logrado conquistar, poco a poco, el estómago de los madrileños. El propietario del Restaurante Calsots en Hoyo de Manzanares, David Suriol, asegura que "cuando empezaron nos preguntaban qué son los calçots, cómo se comen. Cortaban el calçot con cuchillo y tenedor para metérselo quemado en la boca. Pero la evolución ahora es clarísima: ahora la gente ya sabe que hay que ponerse un babero, sabe como pelar el calçot…".

Los valores de una calçotada

Los calçotada se asocia a valores culturales y gastronómicos:

- Tradición y familia. La calçotada se celebra en grupo, con familiares, amigos o vecinos en torno a una mesa para compartir una comida y disfrutar juntos. Es una tradición que ha pasado de generación en generación y que representa una forma de unir a la comunidad.

- Respeto por la naturaleza. Los calçots, que son un tipo de cebolla tierna que se asan a la brasa, se cultivan de forma sostenible y respetando el medio ambiente. Se trata de un producto local, exportable por su fácil conservación y de temporada que se disfruta en su mejor momento.

- Comida saludable. La calçotada se compone de fierentes platos, pero el protagonista indiscutible son los calçots, que se acompañan de salsa romesco, carne a la brasa, embutidos, pan con tomate y cerveza, vino o cava. Se trata de una comida saludable, que se basa en productos frescos y de calidad.

- Generosidad y hospitalidad. En una calçotada, la comida se comparte y se reparte entre todos los comensales, fomentando la generosidad y la hospitalidad. Una ocasión para disfrutar de la compañía de otros y compartir experiencias.

- Sonrisa. Es uno de los lemas del calçot: "es la única cebolla que te hace sonreír, todas las otras cebollas te hacen llorar".