Una de las principales preocupaciones de la Policía Nacional es atender a las demandas de seguridad que les plantean los colectivos ciudadanos, destacando entre ellas la desarticulación de puntos de menudeo de sustancias estupefacientes, ya que los mismos crean un alto grado de inseguridad y alarma social entre los vecinos próximos a dicho punto.
Así, desde hace un tiempo se venían recibiendo informaciones por parte de distintos vecinos de la ciudad que indicarían que en un domicilio sito en una céntrica calle de esta ciudad se estaría menudeando con sustancias estupefacientes, siendo habitual el trasiego de personas que entraban y salían constantemente de esta vivienda. En ocasiones, los propios vecinos encontraban a individuos consumiendo sustancias en los espacios comunes del edificio o en las cercanías, tras haber salido del domicilio señalado.
Gracias a esta colaboración ciudadana se pudo iniciar una investigación por parte de la Brigada de Policía Judicial. Se constató que en esa vivienda residía una persona con antecedentes delictivos que incluyen algunos relacionados con el tráfico de drogas. También se llevaron a cabo vigilancias que permitieron comprobar como personas conocidas por ser consumidoras de sustancias estupefacientes visitaban la vivienda por cortos espacios de tiempo.
Una vez recabados los suficientes indicios que indicarían sin lugar género de dudas que esa vivienda constituiría un punto negro de menudeo de drogas, se procedió a solicitar a la Autoridad Judicial el correspondiente mandamiento de entrada y registro, que se llevó a cabo en la mañana del miércoles 10 de marzo.
Una vez efectuada la entrada y registro se intervinieron varias básculas de precisión, cocaína, metadona, sustancias de corte, y 16 cajas conteniendo 800 pastillas de opioides sintéticos y benzodiacepinas, las cuales en el mundo del menudeo tendrían un valor aproximado de 5.000 euros.
El detenido fue puesto a disposición del Juzgado de Instrucción de Guardia de esta ciudad.
