Este cronista sólo es un escribidor, ahora mismo un hablador, que comenta como malamente puede los aconteceres que el director de 'Más de Uno' le plantea. No es especialista en nada y tampoco en asuntos educativos. Renuncia, por tanto, a dar ni quitar la razón a la ministra o a la presidenta de la Comunidad de Madrid.
Que Feijóo respalde a esta última, responde a la lógica de partido. Por mi parte no doy la razón a nadie, pero hay síntomas y antecedentes de que la puede tener Ayuso.
Que el currículo de Bachillerato atente contra la libertad o la justicia, me parece mucho decir; pero que hay manipulación ideológica me parece innegable; que se intenta presentar la historia del último siglo de España con tintes de ensalzamiento republicano y desconocimiento del casi medio siglo de democracia, es evidente; y que una de las obsesiones de la izquierda ha sido la formación ideológica está demostrado desde el debate de la Constitución.
Ante ello, acudir a los tribunales es un procedimiento de legítima defensa de otras ideas o de otra forma de ver la Educación. Es un derecho que asiste a todos, también a los políticos si no tienen mayoría para cambiar algo en los Parlamentos.
Se puede discutir si un tribunal, por alto que sea, puede meterse a gobernar o actuar como tercera cámara, como si fuese oposición. Pero eso lo dirán los jueces. Mientras tanto, es una garantía poder acudir a ellos. No tengo muy claro lo del Supremo. Tengo clarísimo el recurso constitucional.
