Poco se habla de enfermedades como la poliposis nasal cuando es uno de los motivos de consulta más habituales de un otorrinolaringólogo.
Desde la Clínica Universidad de Navarra señalan que se trata de formaciones blanquecinas que aparecen en el interior de las fosas nasales o de los senos paranasales y se originan por un proceso inflamatorio de la mucosa. Aunque son benignos, pueden crecer hasta el punto de llegar a obstruir completamente las fosas nasales.
Si son de pequeño tamaño, afirman desde Cinfa, pueden ser asintomáticos. Y añaden que, en el caso de que sean grandes, pueden aparecer signos como la obstrucción o congestión nasal, la pérdida o disminución del sentido del olfato, la secreción nasal excesiva y la presión o dolor facial. En ocasiones y con menor frecuencia, pueden encontrase dolores de cabeza y también puede haber estornudos o picor nasal.
La Sociedad Española de Otorrinolaringología y Cirugía de Cabeza y Cuello (SEORL-CCC) añaden que se trata de una enfermedad que afecta a una de cada cuatro personas y la padece del tres al seis por ciento de la población, produciendo una merma en la calidad de vida de los pacientes.
Para profundizar sobre esta patología la SEORL-CCC presentará la Guía POLINA 2022, un documento de consenso sobre rinosinusitis crónica y poliposis nasal (RSCcPN) en el que han colaborado con la Sociedad Española de Alergología e Inmunología Clínica (SEAIC) y la Sociedad Española de Neumología y Cirugía Torácica (SEPAR).
En ella, los autores advierten que, aunque existen tratamientos efectivos, no están disponibles para la mayoría de los pacientes ya que no están financiados. Es lo que hay. Seguro.
