Distan solo 10 días para las elecciones y España se encuentra inmersa entre olas de calor. La segunda ola llega hoy a su fin, tras 3 jornadas de mucha intensidad. Durante el fin de semana las temperaturas serán más suaves, sin embargo, el lunes volverán a subir yendo en aumento a lo largo de toda la semana hasta alcanzar los 41 grados el domingo en Madrid.
Se teme que la jornada electoral esté marcada por el calor y en consecuencia baje la participación. Bien es cierto, que serán las elecciones en las que haya un mayor número de votos por correo, se estima que unos 2 millones de personas lo han solicitado. El plazo además termina hoy. También es arriesgado por la fecha convocada para la votación, en la que se estima que unos 20 millones de personas se encontrarán fuera de sus casas debido al periodo vacacional.
Además, la celebración coincide con el fenómeno de la "canícula", que se refiere al periodo más cálido del año que se extiende del 15 de julio al 15 de agosto. Suele estar acompañado de temperaturas muy elevadas y semanas secas. El 23 de julio del año pasado, "estábamos en medio de una ola de calor, la más importante hasta la fecha. Ese día, los termómetros marcaron 44 grados en Córdoba y casi 40 en Madrid", explica Rubén del Campo, meteorólogo de la AEMET.
Por último, estos fenómenos meteorológicos pueden afectar directamente sobre la decisión en el voto del electorado que dependiendo del tiempo que haga puede variar su comportamiento, con sensaciones negativas si se trata de calor. Sin embargo, quien lo sufrirá directamente será quienes formen parte de un colegio electoral, ya que la gran mayoría de ellos no están acondicionados para soportar las extraordinarias jornadas de calor.
