Rousseff nombra ministro a Lula, cuyo aforamiento dilataría sus causas judiciales

El nombramiento aún no ha sido confirmado por el Gobierno, pero sí lo hizo el jefe del grupo del Partido de los Trabajadores (PT) en la Cámara de Diputados, Afonso Florence, en declaraciones a los periodistas.

La decisión, según el jefe del grupo del Partido de los Trabajadores, fue tomada después de una rueda de consultas que Rousseff tuvo durante los últimos dos días con el expresidente en el Palacio de la Alvorada, residencia oficial de la Presidencia en la que Lula vivió entre 2003 y 2011, período en que ejerció como jefe del Estado de Brasil.

Las causas por las que está siendo investigado van desde sospechas por enriquecimiento ilícito y blanqueo de dinero hasta falsificación de documentos. Lula tendrá la condición de aforado y esas causas pasarán de la justicia común al ámbito de la Corte Suprema, lo cual dilatará el proceso.

Por ese motivo, la oposición brasileña ha presentado una demanda ante un tribunal de Brasilia, al que solicita que impida el posible nombramiento como ministro de Lula. El documento acusa a la presidenta del país, Dilma Rousseff, de "usar su prerrogativa de escoger libremente a los miembros de su Gobierno para privilegiar" a su padrino político.

"Es un claro intento de obstruir a la justicia y caracteriza un desvío de finalidad, pues el único objetivo de esa maniobra es garantizarle a Lula un foro privilegiado", declaró el jefe del grupo del PPS en la Cámara de Diputados, Rubens Bueno, al presentar la demanda.