Portugal, país con una de las tasas de vacunación más altas del mundo y la más elevada de la UE, ha anunciado que volverá a imponer nuevas restricciones contra el coronavirus ante el rápido aumento de casos que están registrando.
"Estamos mejor que la generalidad de los países europeos, pero no estamos tan bien como querríamos. Por eso es el momento adecuado para adoptar nuevas medidas", señaló el primer ministro, António Costa, en rueda de prensa tras el consejo de ministros.
Mayor control fronterizo
Los pasajeros que lleguen a través del aeropuerto deberán mostrar un test negativo, independientemente de si están vacunados. "Debemos ser conscientes de que estamos entrando en una fase de mayor riesgo", ha declarado el primer ministro Antonio Costa. "Hemos visto un crecimiento significativo (en casos) en la UE y Portugal no es una isla", ha afirmado Costa.
No estamos tan bien como querríamos
"Constatamos que, infelizmente, las compañías de aviación no han cumplido su obligación", ha asegurado el primer ministro, que señaló que en los aeropuertos se controlará de forma sistemática, y no aleatoria, a todos los pasajeros, para lo que se recurrirá a empresas de seguridad privada.
El 87% de la población de Portugal ha sido vacunada
Portugal registró este jueves más de 3.000 contagios. Del mismo modo, las muertes permanecen muy por debajo de los niveles observados en enero, cuando el país enfrentó su batalla más dura contra coronavirus. Alrededor del 87% de la población de Portugal de poco más de 10 millones ha recibido la pauta completa de vacunación contra el coronavirus.
Pero, a medida que otra ola de la pandemia se extiende por Europa, el Gobierno ha decidido reintroducir algunas restricciones antiguas en el período previo a la temporada navideña.
Debemos ser conscientes de que estamos entrando en una fase de mayor riesgo
PCR negativa antes de entrar en locales de ocio, incluidas las personas vacunadas
Costa también ha anunciado que los que estén completamente vacunados deben también presentar una PCR negativa para entrar en discotecas, bares, grandes eventos y residencias. Se solicitará el pasaporte covid para alojarse en hoteles, acudir al gimnasio o restaurantes.
Del mismo modo, decreta el teletrabajo obligatorio durante la primera semana de enero para controlar la propagación después de las navidades.
"Contención" tras la Navidad
El Gobierno luso también ha preparado una "semana de contención de contagios" tras las fiestas navideñas para intentar evitar así que las reuniones familiares provoquen una subida en la propagación del virus, como ocurrió el año pasado.
Por ello, entre el 2 y el 9 de enero será obligatorio teletrabajar y cerrarán las discotecas. El inicio del trimestre escolar, que estaba previsto para el día 3, se retrasa hasta el 10.
"Todos queremos una Navidad segura y, después de eso, queremos retomar la vida de forma segura", afirma António Costa.
